El mejor cine está en la tele
Este es un momento muy interesante para los amantes del buen cine, porque lo que tantos temíamos y esperábamos al fin ocurrió. Es enero y la mayoría de las películas que serán nominadas para los Oscar, el próximo día 23, ya se pueden ver o se podrán ver antes de febrero en la televisión y en los cines de nuestro país.
¿Por qué es relevante esto?, porque por muchos años el Oscar no parecía ser de interés de la mayoría de la gente por el simple hecho de que las cintas más nominadas, las independientes y las distintas, no tenían fecha para llegar a nuestro país cuando ya corría la temporada de premios, que este año culminará el 10 de marzo en el teatro Dolby de Los Ángeles.
¿Lo curioso? Que las cintas que serán las importantes para la contienda ya están en los servicios de streaming, a la renta, por estrenarse la semana de las nominaciones (Pobres criaturas con Emma Stone, por ejemplo) o a punto de reestrenarse en las salas IMAX con la nueva tecnología láser que se está promoviendo tanto en nuestro país. Sí, Oppenheimer regresa a la pantalla más grande de todas y si no la han visto en cine les sugiero que esperen, Cristopher
Nolan se los agradecerá mucho.
El hecho es que, igual que con las series de tv en los Globos de Oro, y pronto en los Emmy, las premiaciones no son solo para quien tenga tiempo de viajar, de cachar las cintas en salas de arte con mucho esfuerzo o de plano recurran a la piratería. Y por más que les suplicaré que vean el trabajo de Nolan o de Scorsese en el cine, hay cintas que merecerían esa misma consideración pero que aterrizaron casi de inmediato en sus streamers productores y ni modo. Maestro de Bradley Cooper es el mejor ejemplo de ello y no puedo
_ creer cómo una maravilla así ha hecho tan poco ruido. De lo perdido lo encontrado y esto es que sin Netflix, Apple, etcétera, no existirían muchas de estas grandes obras.