La línea Levi
1. Natalia Ginzburg, de padre judío, publicó su texto “Los judíos” en La
Stampa el 14 de septiembre de 1972. 2. Nueve días antes ocho miembros del comando palestino Septiembre Negro irrumpieron en el departamento de la Villa Olímpica en Múnich donde estaban los atletas de Israel. Dos de ellos, al oponerse, fueron asesinados de inmediato y otros nueve quedaron como rehenes. El comando exigió que el Estado de Israel les entregara a 234 prisioneros árabes detenidos en sus cárceles, además de la liberación de Andreas Baader y Ulrike Meinhoff, jefes del grupo armado Fracción del Ejército Rojo, presos en Alemania. El gobierno israelí y
Levi también era muy crítico del gobierno israelí: “La guerra es siempre una abominación”
el alemán se negaron a la exigencia. La tarde de ese día, en un tiroteo en el aeropuerto de Múnich murieron los nueve atletas, cinco del comando y un policía alemán. 3. En su artículo Ginzburg tomaba partido por los árabes; los definía como “pobres campesinos y pastores”, calificaba a los terroristas como “guerrilleros” y hablaba sobre su “inhumana desesperación”. 4. Recibió una carta de su amigo Primo Levi, sobreviviente de Auschwitz. Le decía en una parte: “No comparto esto. (Los palestinos inhumanamente desesperados) no se convierten en terroristas, sino que caen en la inercia, como sucedía en los campos de exterminio… El terrorista tiene otra sustancia humana: es astuto y fuerte y posee esperanza, es decir, es responsable y como tal hay que juzgarlo; o bien (y creo que este es el caso más frecuente…) la violencia le ha sido contagiada y transmitida desde arriba, y no procede de su propia desesperación o indignación”. Levi también era muy crítico del gobierno israelí: “La guerra es siempre una abominación, y precisamente por eso un gobierno responsable tiene que ponerse unos límites que
_ no deben cruzarse en ningún caso”. Y muy consciente del antisemitismo. (V. Natalia Ginzburg: Vida imaginaria. Lumen, 2023).
5. Pienso que un traslado al hoy de la línea Levi sería así: Abominar de Hamás. Abominar de Netanyahu. Dejar en paz a “Los judíos”.