¿Por qué complicarse la vida?
Recuerda todos aquellos momentos de tensión, de estrés, de frustración que has sentido cuando las cosas no salen de la forma como lo deseas.
Quiero que recuerdes todos esos momentos cuando la actitud de otras personas te molesta y te causa una mala sensación en tu cuerpo, o cuando sientes una furia por dentro y ésta recorre tus venas; cuando has sentido que hierves de coraje, de impotencia y desesperación.
El vivir en armonía se aprende; no es algo que aprendimos en las escuelas, de nuestros padres o de aquéllos que hayan tenido algo que ver con nuestra educación (es muy probable que ninguno de ellos supiera cómo manejar o enfrentar estos temas).
Ahora, nosotros tenemos esta información, y es cuestión de implementar los cambios en nuestra vida diaria para poder transformar todo aquello que en el tiempo nos ha costado tanto aceptar, y mucho más modificar.
En lo personal, lo relaciono mucho con el tema de la comida: cuando tomé conciencia y empecé a alimentarme sanamente (lo cual debería de ser lo normal), en automático me convertí en “la rara” de mi grupo de amigas; algo similar pasó en mi casa, con mi familia y en las reuniones sociales.
Y esto sucede porque la sociedad actual nos ha hecho ver cosas distintas de lo que la comida representa y nos hemos creído ese cuento.
Lo mismo sucede con el tema emocional: cuando andas buscando ambientes más tranquilos que te llenen de energía, empiezas a ser “el raro” del grupo, piensan que algo te está pasando, que te están perdiendo de este plano terrestre.
El valor de lo simple
Hay que poner atención en no complicarse la existencia: no te castigues, porque muchas veces te enfocas en esto y es como estar buscando más problemas inconscientemente, es una búsqueda de más cargas.
Cuántas veces preguntamos cosas que realmente no queremos saber, ni queremos enterarnos de la respuesta sabedores que nos puede lastimar, sin embargo, insistimos.
¿Por qué te haces daño? Si sabes que te puede afectar o peor aún, si ya conoces la respuesta, sobre todo si sabes que te va a traer consecuencias emocionales. Entonces lo mejor es no preguntar, y otras veces es mucho mejor no contarlo todo.
Usualmente, las cosas son más sencillas de lo que parecen; ¿por qué nos complicamos la vida? El no saber simplificar las cosas puede ser fuente de un importante malestar en nosotros, en nuestra vida.
De aquí nace la incógnita: los humanos, siendo los seres vivos más inteligentes que existen en la Tierra, tendemos a complicarnos la vida… ¿Por qué?
Contestar esto requiere de entender que todo cuanto nos pasa es el conjunto de experiencias acumuladas en nuestra vida, y de aquí nacen otras interrogantes que vale la pena analizar.