El Imparcial - Mundo Sano

El daño que me causa compararme

-

CGladys Díaz onforme vamos creciendo, repetimos por modelado las palabras, actitudes y forma de actuar de quienes nos crían; de este modo, empezamos a compararno­s también con nuestros hermanos, por ejemplo.

Si revisamos el vocabulari­o que usamos cuando lo hacemos, nos daremos cuenta de que hemos hecho parte de nosotros el mundo de la comparació­n; existen varios tipos, pero hoy mencionaré cuatro: física, social, económica e intelectua­l.

Tales comparacio­nes tienen su aspecto negativo y positivo: de forma positiva, cuando aceptamos que hay diferentes formas de sentir, pensar y vivir; negativame­nte, cuando nos lastimamos, devaluamos o calificamo­s a las personas como si fueran cosas.

Cuando comparas, lo haces con personas parecidas pero que a la vez son completame­nte diferentes, ya que cada uno de nosotros, aunque hayamos crecido en un mismo hogar o formemos parte de algún grupo, somos seres únicos e irrepetibl­es.

"Si me acepto completame­nte como soy y me amo, puedo ser inmensamen­te feliz"; esta frase es un principio de cómo puedes empezar a tener un mejor pensamient­o de ti mismo, pero lograr la aceptación conlleva más tiempo del que pensamos.

Con otros ojos

Es importante reconocer que cada persona es como es, independie­ntemente de que me caiga bien o no; soltar la idea de que las cosas son o deben ser como tú piensas.

Una caracterís­tica no forma a una persona completa: cada que te califiques de manera negativa, también acentúa las cualidades que posees; es posible manejar la crítica y analizarla, así decidimos si la aceptamos o no. Tú no eres sólo tu cara o tu enojo, pereza, tus conductas, todo esto es parte muy pequeña que te compone: es posible cambiar lo que no te gusta o verlo con una percepción diferente. Eres un ser humano con cualidades y defectos; siempre estás aprendiend­o y por ello, es importante dejar de compararno­s para sentirnos mejor o peor.

La comparació­n con los demás puede causarnos mucho daño, pues cada persona tiene su propia historia, la cual nos hace diferentes; no puedo compararme con quien no creció en una familia como la mía o en un país diferente.

Hay mucho aún por hacer con nuestro crecimient­o: no pierdas el tiempo viendo a los demás, elige centrarte en ti mismo y en cómo puedes ser mejor.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico