Alimento para el cerebro
Su nombre viene de las siglas en inglés que significan "Intervención mediterránea-DASH para el retraso neurodegenerativo", combinando los beneficios de ambas dietas populares para mejorar la calidad de vida en pacientes con demencia y
Alzheimer.
"La dieta MIND nos enseña un énfasis en lo que mencionaba Hipócrates, quien decía: 'Que el alimento sea tu medicina y que la medicina sea tu alimento', y tiene como fin prevenir enfermedades de cambios neurológicos. "A personas que tienen Alzheimer en desarrollo o están comenzando con episodios de demencia se les puede indicar esta dieta con el propósito de retrasar lo más que se pueda, en compañía de los medicamentos, el progreso de la enfermedad y disminuir su intensidad", mencionó Verónica García Bonales, nutrióloga del Centro CureART. Dos dietas preexistentes se fusionan con este propósito: la DASH, que plantea un enfoque dietético para detener la hipertensión y la mediterránea, que apoya en el tratamiento de condiciones cardiovasculares; un híbrido que enfatiza el impacto de los alimentos en la salud cerebral.
Cómo aplicarla
"La combinación de ambas dietas invita a los consumidores a incluir el consumo de ajo, frutas y verduras en abundancia -carnes magras y carnes rojas en menores cantidades-, así como ácidos grasos como el omega 3 y el omega 6, que se encuentran principalmente en el aceite de oliva.
"Se tiene que ajustar la porción de alimentos de origen animal y la persona debe estar dispuesta a consumir los alimentos de este origen; sí hay proteínas vegetales, pero hay nutrientes que no se encuentran en todos los alimentos, por lo que es un poco difícil en el caso de las personas que no consumen este tipo de alimentos", agregó la experta en nutrición.
Además de las verduras y el bajo consumo de carnes, la dieta se caracteriza por alimentos como nueces, bayas, frijoles, lentejas y soya que contienen proteínas y fibra, además de evitar productos ultraprocesados. "Además del cerebro, como es una dieta que reúne lo mejor de dos, beneficia a la salud en general; a nivel cerebral, retrocede el avance neurológico de la demencia; favorece la salud cardiovascular, mientras se siga la alimentación balanceada y equilibrada junto a un consumo de agua adecuado y un estilo de vida saludable", puntualizó.