Ama lo que comes
Los consumidores de todas las edades buscan ahora llevar vidas más sanas, y muchos de ellos saben que se acercan más al elegir opciones de comida saludable.
Compleja es la relación entre las personas y su comida: para muchos, de amor-odio, en conflicto por no encontrar fácilmente el balance al tomar los alimentos (cantidad, calidad, tiempos); aparentemente, esto está por cambiar. En el estudio "Estilos de vida generacionales", realizado por la consultora internacional Nielsen en 60 países -incluyendo México-, se dividió a la población mundial en cinco generaciones: Z (15 a 20 años), millennial (21 a 34), X (35 a 49), baby boomer (50 a 65) y silenciosa
(más de 65 años).
Entre los datos encontrados por Nielsen, destaca que los millennials son más propensos a comer fuera de casa por lo menos una vez a la semana, con un 58%. Alrededor del 30% de los millennials encuestados señaló que visita restaurantes en más de tres ocasiones cada siete días; en segundo lugar se posiciona la generación Z, con un 46% de integrantes que procuran restaurantes y similares.
Se acusa a los más jóvenes de no despegarse del celular, ni siquiera cuando están comiendo; sin embargo, el estudio revela que en realidad es la generación de los baby boomers la que más se conecta a la tecnología durante la comida, con una tasa del 52% -frente a un 48% de los millennials y un 40% de los Z-. Etiquetas como "comercio justo", "libre de gluten", "orgánico" y "altos en proteínas" son especialmente apreciadas por los millennials, pues 34% de ellos prefieren los alimentos marcados con estos nombres y no les importa pagar un poco más.
Por otro lado, para los consumidores más maduros son atributos como "bajo en sodio" o "bajo en azúcar" los que captan su atención al momento de tomar los productos de los anaqueles.
50% de los participantes de todas las generaciones afirman estar dispuestos a pagar un precio más alto por comida que brinde beneficios a la salud.
30,000 personas de 60 países participaron en el estudio de Nielsen.