Temporada de alergias

Con la primavera llegan también miles de diminutas partículas de polen que desencadenan esta condición en muchos pacientes; conoce la razón de esto y cómo disminuir las molestias.

Existen dos tipos de personas cuando entra esta estación: quienes festejan los cientos de colores que cubren la naturaleza, y quienes la sufren en carne propia pues les desencadena reacciones como congestión nasal, moqueo y estornudos a causa de la rinitis alérgica, también conocida como fiebre de heno.

Los pacientes afectados llegan a presentar esos síntomas con tal intensidad que afecta su desempeño en el trabajo o en la escuela; sin embargo, conviene saber que puedes aprender a evitar los desencadenantes y encontrar un tratamiento adecuado para ti.

Clínica Mayo, sistema hospitalario y referente internacional de investigación médica, a través de su sitio web comparte información sobre el tema y algunos consejos para hacerle frente.

Origen

La rinitis alérgica provoca que el sistema inmunitario identifique las sustancias aéreas –como el polen, los ácaros del polvo o pequeñas partículas de piel y saliva que arrojan algunos animales- como nocivas y produce anticuerpos para atacarlas.

Tiene un fuerte componente hereditario y a primera vista parece una enfermedad simple, sin embargo, perjudica la calidad de vida de quienes la padecen, por lo que es recomendable realizarse un estudio alergológico para que el especialista recomiende un plan de acción.

Síntomas

Además de los previamente mencionados, los ojos enrojecen y se vuelven llorosos; puede haber también picazón de nariz, paladar y garganta, piel hinchada y de color oscuro debajo de los ojos, así como cansancio en exceso. Se pueden prolongar tanto tiempo como dure la exposición a los detonantes; a diferencia de un resfriado común, cuando es reacción alérgica no hay presencia de fiebre.

Tratamiento

Lo más efectivo para controlar la rinitis alérgica es alejarse de las sustancias que desencadenen las molestias; igualmente, algunos medicamentos son capaces de disminuirlas, como los antihistamínicos orales, los descongestionantes, el aerosol nasal y medicinas combinadas. Asimismo, existen remedios alternativos como la acupuntura y los extractos de arbusto de petasita y de espirulina, sin embargo, no hay aún suficiente evidencia médica respecto a los beneficios y la seguridad de su uso; lo recomendable es consultar con un especialista antes de probarlos.

25-35% delos mexicanos padecen rinitis alérgica.