Parte III
Sin duda la oncología está viviendo una completa revolución. La nueva generación de medicamentos y el desarrollo de novedosas líneas terapéuticas representan una gran esperanza para los pacientes con cáncer. Gracias al uso de la inmunoterapia, cánceres tradicionalmente agresivos como el melanoma en etapa III por fin tienen una opción de tratamiento. Por su parte, las terapias dirigidas dan hoy buenos resultados ante el cáncer de seno, de riñón, pulmón, leucemia, linfoma, melanoma, mieloma múltiple, próstata, páncreas, adenocarcinoma de estómago, entre otros.
Poco a poco los pacientes en México también se están beneficiando con esta avalancha de tratamientos. Si bien sólo es posible acceder a varios de los fármacos mediante protocolos experimentales, algunos ya han sido lanzados al mercado. Por ejemplo, en junio pasado la Comisión Federal contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) aprobó Trastuzumab, un anticuerpo monoclonal para cáncer de seno HER2; un mes más tarde tocó el turno a Nivolumab, tratamiento indicado para algunos cánceres de pulmón, carcinoma renal avanzado y melanoma metastásico. Y se espera que en los próximos años se autoricen más.
Además se están haciendo esfuerzos para promover el uso de terapias dirigidas y personalizadas, con el fin de brindar a los pacientes el tratamiento más adecuado de acuerdo con su tipo de cáncer. Desde mediados del año pasado las farmacéuticas AstraZeneca y Novartis firmaron la iniciativa “Sólo por ti”; durante los próximos dos años proporcionarán de manera
Claroscuros
gratuita pruebas de diagnóstico molecular para la detección de mutaciones en los genes ALK, eGFR y KRAS en pacientes con cáncer de pulmón. “La diferencia en la calidad de vida de los pacientes con estos fármacos es notable. No hay punto de comparación”, afirma vía telefónica el Dr. Guadarrama Orozco.
El costo de vivir
Pero no todo puede ser color de rosa. Existe un grave problema que está limitando el uso de estos medicamentos a nivel mundial: su costo. Fácilmente el precio de estas terapias puede ir de 40,000 a los 70,000 pesos mensuales. Mínimo, 480,000 pesos al año. Impagable para la mayoría de la población que no cuenta con un seguro de gastos médicos.
Incluso para los pacientes de países como Estados Unidos vivir con cáncer significa la ruina económica. A la par de las innovaciones, en los últimos años el precio de los medicamentos se ha disparado hasta el punto de que hoy día el costo promedio de estas terapias rebasa los 100,000 dólares al año. Aun contando con un buen seguro de gastos médicos, los pacientes deben poner de su bolsillo un deducible que puede ir de los 20,000 a los 30,000 dólares, casi la mitad del ingreso anual promedio en EUA, indica el Dr. Hagop Kantarjian, del Centro de Cáncer de Texas, en un artículo publicado en el Journal of Oncology Practice de 2014.
Las farmacéuticas argumentan que los altos precios son el reflejo de los costos de investigación y desarrollo que deben invertir. Pero esto no explica que los precios sigan aumentando alrededor de 5% cada año después de su lanzamiento. Incluso, estudios como el realizado por Caroline Bennette, profesora asistente de la Universidad de Washington, en Estados Unidos, han detectado que los mayores aumentos ocurren cuando una droga ha demostrado ser efectiva para más de un tipo de cáncer.