Recordamos el histórico viaje de Valentina Tereshkova, la primera mujer en el espacio.
Hace 59 años, la cosmonauta soviética Valentina Tereshkova se convirtió en la primera mujer en viajar al espacio.
De niña, cuando escuchaba el tren, Valentina Tereshkova soñaba con poder viajar a lugares lejanos. A los 26 años de edad su sueño se hizo realidad viajando a un sitio al que ninguna otra mujer en el planeta había llegado. El 16 de junio de 1963, a bordo de la nave Vostok 6, esta rusa se convirtió en la primera mujer en trasladarse al espacio, tan sólo dos años después de la hazaña de Yuri Gagarin, el primer hombre en lograrlo, también ruso.
Hija de un campesino y una obrera, Valentina empezó a trabajar en una fábrica textil a los 17 años para ayudar a su madre y decidió continuar sus estudios en una escuela nocturna, sin imaginar que su vida cambiaría al poco tiempo. En mayo de 1959, cuando tenía 22 años, la futura cosmonauta saltó por primera vez de un paracaídas, lo que marcó su destino. Meses atrás, Tereshkova se había unido a un club de paracaidistas al que diario veía entrenar de camino al trabajo, en la ciudad de Yaroslavl, a 250 kilómetros al noreste de Moscú.
Las cinco elegidas
Serguéi Koroliov, fundador del programa espacial soviético y principal diseñador de cohetes del país, estaba convencido de que una mujer podía repetir la hazaña de Gagarin, y no descansó hasta que Nikolái Kamanin, jefe de la Fuerza Área Soviética, aceptó la iniciativa; a los pocos días el primer ministro, Nikita Jruschov, dio el visto bueno también. Era una nueva oportunidad para seguir llevando la delantera en la carrera espacial con Estados Unidos.
En febrero de 1962 comenzó la selección de candidatas. ¿Los requisitos? Tener menos de 30 años, medir menos de 1.70 metros de estatura y haber hecho más de 200 saltos en paracaídas. Esto último era indispensable, pues en aquel tiempo sólo se podía aterrizar, tras el reingreso, saltando de las cápsulas espaciales con paracaídas. De un grupo de más de 400 mujeres eligieron nada más a cinco: Irina Solovyova, miembro del equipo nacional del paracaidismo de la Unión Soviética; Tatiana Kuznetsova, piloto de caza del Instituto Aéreo de Moscú; Valentina Ponomariova, matemática y programadora; Zhanna Yorkina, profesora de primaria, y Valentina Tereshkova.
La decisión final
En marzo de aquel año comenzó de manera oficial la preparación. Las candidatas se sometieron durante meses a entrenamientos que incluían pruebas de ingravidez, de aislamiento, ejercicios bajo el agua… Lo más