Pidogordo de Santo Tomé
(Crithagra concolor)
El ave de la fotografía –abajo, dos ejemplares– es un canario, pero mide casi el doble que los canarios domésticos y pesa 50% más que la especie más grande de esta familia; alcanza 20 centímetros, mientras que sus ‘ familiares’ enjaulados tienen sólo 13 centímetros.
Además de su gran cuerpo, una de las características de esta especie es el tamaño de su pico, el cual es muy grande en proporción a su cabeza. Los ejemplares tienen plumas en color marrón, la cabeza aplanada y el pico gris oscuro, características que los hacen visualmente más parecidos a un loro que a un canario.
La especie, considerada en peligro crítico de extinción, fue descubierta en 1888 por el naturalista portugués Francisco Newton, quien logró recoger tres especímenes. Durante 101 años no se supo nada de ellos, pero tras varios años de trabajo de campo en la isla de Santo Tomé y Príncipe, el biólogo Martim Pinheiro de Melo, de la Universidad de Oporto, Portugal, logró capturar otros cuatro ejemplares. Luego de analizarlos genéticamente, descubrió que la especie pertenece a la familia de los canarios (género
Crithagra) y no a un género separado ( Neospiza), como se había creído.
Estos canarios son endémicos de los bosques tropicales de la isla de Santo Tomé, Golfo de Guinea y África occidental. Según los investigadores portugueses, las dos especies de Crithagra divergieron de un antepasado común hace aproximadamente 1 millón de años.