EL FALSIFICADOR DE ARTE
Mentir para autoengrandecerse
Mark Landis, quien dice que era un fracaso como artista comercial, pasó casi tres décadas imitando las obras de pintores famosos, incluyendo esta con el estilo del artista folclórico William Matthew Prior. Haciéndose pasar por filántropo o sacerdote jesuita, las donaba a museos y disfrutaba que lo trataran con respeto. “Nunca había vivido algo así y quería seguir –confiesa–. No me remuerde la conciencia. Cuando me desenmascararon y tuve que parar, lo lamenté mucho”.