EL AGENTE SECRETO
Mentir por la patria
Valerie Plame, ex agente de la CIA, trabajó encubierta por dos décadas. En 2003, su identidad falsa fue descubierta y su carrera clandestina terminó cuando oficiales de la administración de Bush filtraron su nombre a columnistas de un diario. Ella y su marido afirman que fue una venganza por su afirmación de que la Casa Blanca había exagerado la información para justificar la invasión a Irak. ¿Qué aprendió de sus años como espía? “La mayoría de la gente –dice– está más que dispuesta a hablar desi misima".