National Geographic Traveler (México)
Villa Montaña Hotel & Spa
UN HOTEL REPLETO DE ARTE E HISTORIA.
En la década de los cincuenta, un conde francés se enamoró de los edificios de cantera rosa y el arte barroco del siglo XVI que resguarda la ciudad de Morelia; así que decidió quedarse y, en 1959, abrió un hotel en lo alto de una montaña, de donde proviene su nombre. Desde entonces comenzó a coleccionar piezas de arte para decorarlo, así que sentirte en un museo será algo inevitable. Su concepto se basa en hacer que los huéspedes disfruten de un maravilloso lugar para cargar sus energías hacia las diferentes atracciones que
INFORMACIÓN ofrece el destino. Los dueños actuales combinan sus talentos decorativos en interiores y arquitectura. Posee 36 habitaciones, la mayoría de ellas con más de una chimenea y terraza, desde donde puedes disfrutar de la vista panorámica. Además cuenta con piscina, cancha de tenis, gimnasio, restaurante, salones para eventos, spa y, por si viajas con niños pequeños, ofrece el servicio de babysitter. Su restaurante –muy recomendable– ofrece la tradicional comida michoacana, la cual sirvió de base para que la cocina mexicana fuera candidata a convertirse en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO en el 2010. No dejes de visitar el nuevo campo de golf clase PGA con 27 hoyos, diseñado por Jack Nicklaus y realizar alguna de las excursiones que organizan a Pátzcuaro, reconocido mundialmente por su tradicional ceremonia del Día de Muertos, o bien a Tzintzuntzán, la última capital del imperio Tarasco. El hospedaje incluye un tour al santuario de las mariposas monarca (es.villamontana.com.mx).