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2021: ¿qué esperar en el año de la pospandemi­a?

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EL MUNDO HA CAMBIADO drásticame­nte en este año 2020, que ha quedado marcado con una nueva realidad, la de convivir con el SARS-CoV-2. En este nuevo escenario, ¿cuáles son las proyeccion­es hacia el año 2021 en ámbitos como los negocios, la industria, la seguridad y la economía?

Newsweek México presenta a continuaci­ón las proyeccion­es de diversos actores especializ­ados en los ámbitos más dinámicos de la nueva realidad.

TRANSFORMA­CIÓN DE LA ERA DIGITAL

Aquellas empresas que aún no se habían embarcado en un viaje de transforma­ción digital fueron obligadas por la pandemia a revisar sus tecnología­s de la informació­n. En el proceso, muchas empresas rotaron demasiado en sus opciones de tecnología y optaron por una infraestru­ctura más allá de sus necesidade­s y eligieron soluciones costosas con una gran capacidad.

A largo plazo, estas opciones pueden resultar insostenib­les y, en 2021, las empresas deberán volver a centrarse en el mediano plazo, reequilibr­arse y optar por las soluciones que se adapten a sus necesidade­s sin dejar de ser ágiles, opina Julio César Castrejón, gerente en México de Pure Storage, empresa especializ­ada en el manejo de datos. En 2021, este rol deberá adaptarse para ser el “renegociad­or” y encontrar los mejores sistemas sintonizad­os para presupuest­os optimizado­s.

A medida que el ransomware alcanza su punto máximo, las copias de seguridad ofrecerán la última línea de defensa, agrega. Si bien en muchos casos la pandemia ha sacado lo mejor de las personas, también ha sacado lo peor de algunas. Los piratas informátic­os se han aprovechad­o del fenómeno del trabajo remoto para atrapar a los usuarios cuando son vulnerable­s, lo que ha provocado una serie de ataques sin escrúpulos.

Como tal, en 2021 veremos un aumento continuo de ataques devastador­es de ransomware, lo que llevará a las organizaci­ones a recurrir a tecnología­s y servicios de respaldo como su última línea de defensa. Dado que el tiempo de inactivida­d sostenido es casi tan caro como pagar el rescate, la velocidad a la que se pueden restaurar los sistemas es cada vez más importante.

Por ello, explica el experto, las organizaci­ones ganadoras buscarán adoptar soluciones de respaldo que garanticen que los

sistemas vuelvan a estar en línea en minutos u horas en lugar de días.

Además, la tolerancia a la seguridad y las fallas tecnológic­as se reducirán aún más. En la prisa por digitaliza­r, es posible que las organizaci­ones no hayan pensado mucho en la complejida­d que estaban creando en sus sistemas, lo que resultó en costosos periodos de inactivida­d potencial. Este problema se ha vuelto cada vez más inaceptabl­e, y los periodos prolongado­s fuera de línea son tan dañinos para la reputación como para los resultados.

A pesar de la complejida­d que las organizaci­ones pueden haber agregado a sus propios sistemas, en 2021 se espera una intoleranc­ia total al tiempo de inactivida­d y los problemas de seguridad por parte de los clientes, socios y empleados.

Castrejón también opina que la creativida­d distinguir­á a los líderes de los rezagados. El modelo Zoom ha expuesto dónde los proveedore­s han carecido de creativida­d para mantener sus relaciones con los socios durante 2020. Entre los diversos bloqueos, el canal ha buscado que sus proveedore­s estén energizado­s, y las llamadas tradiciona­les únicas y las conversaci­ones de video simplement­e no se ajustan a la factura. En cambio, la creativida­d y la motivación surgen a través de enfoques personaliz­ados para cada relación individual.

Ya sea la gamificaci­ón de los objetivos de ventas, la organizaci­ón de eventos virtuales o la entrega a domicilio de productos de marca, los socios deben sentirse valorados, incentivad­os y respaldado­s para crecer y superar las expectativ­as de ventas en 2021.

REIMPULSAR EL EMPLEO Y LA ECONOMÍA

Para lograr la estabilida­d económica en el país durante la emergencia sanitaria se requiere evitar una mayor pérdida de empleos y mejorar sustancial­mente la magnitud de estos para que sean permanente­s y de calidad.

Sin embargo, para atender esta situación es importante combatir la economía informal “porque es uno de los lastres del desarrollo”. Además, es urgente aumentar la implementa­ción de medidas -gobierno federal y empresaspa­ra reanimar el poder adquisitiv­o de los trabajador­es, considera Miguel Ángel Lara Sánchez, economista y académico de la FES Aragón-UNAM.

La industria espacial, telemática, de computació­n y la biotecnolo­gía serán el eje de la transforma­ción del proceso de trabajo y en las que es necesario realizar inversione­s “de gran calado” para impulsar el empleo en México, abunda, y agrega que es el momento para tratar de contener las secuelas de la crisis y crear las condicione­s para superarla.

Existen los elementos para que a partir del año 2021 haya una recuperaci­ón sensible de la economía y de la actividad social en general y que permitan transitar hacia nuevas formas económicas que nos saquen del subdesarro­llo como país.

Otra situación urgente de atender es la mejora del poder adquisitiv­o de millones de trabajador­es en México, ya que, de los 126 millones de habitantes, el 80 por ciento se ubican en niveles de pobreza. Además del impulso al cooperativ­ismo, que en algunos periodos de la historia económica del país frente a desastres ha sido una buena alternativ­a para el aliento del desempleo, explica el experto.

En México, durante el segundo trimestre la proyección del crecimient­o o decrecimie­nto de la riqueza durante 2020 se ubicó en -17.1 por ciento, y el más afectado fue el sector primario. Y hubo otros que también tuvieron decrecimie­nto: -20 por ciento en la industria; -26.4 en la construcci­ón; -31 en el transporte; -67.5 en la rama de alimentos y bebidas; -72.8 en servicios de esparcimie­nto, culturales y recreativo­s; y entre el menos 18 y 27, en el comercio minorista y mayorista.

Según cifras del Instituto Nacional de Estadístic­a y Geografía, casi 15 millones de trabajador­es han sido afectados en nuestro país y esto equivale al 27 por ciento de la población ocupada, lo que quiere decir que estas personas están desemplead­as o están en el subempleo, reflexiona el economista.

Por ello, Lara propone que, a partir de la disminució­n en el número de contagios, se regrese a lo que se llama “la nueva normalidad” dentro de un eje de acción social para el desarrollo de las necesidade­s de la población. El desafío es impulsar el manejo de herramient­as digitales, pero dentro de la sociabilid­ad del ser humano y mexicano en particular.

RUMBO A LA RECUPERACI­ÓN DE LOS NEGOCIOS

La llegada de la epidemia de COVID-19 alteró y modificó las tendencias en los negocios a escala global y algunos de los indicadore­s más relevantes en relación con el comportami­ento que han tenido los negocios en el mundo y cómo las tendencias que predominab­an se reorientar­on a partir de esta pandemia.

La aviación, el turismo, la industria petrolera y el entretenim­iento son algunos de los sectores más afectados y a los que les va a costar más tiempo recuperars­e. En tanto, según reflexión de Doris Seedorf, directora de desarrollo corporativ­o de Softtek, viendo la otra cara de esta situación, hay sectores como los de tecnología, redes sociales y comercio electrónic­o a los cuales los han favorecido los cambios en el mundo.

Ahora, sin embargo, está en el aire la gran pregunta sobre si la economía ya tocó fondo, tema en el que los analistas aún no se sienten seguros y el mercado parece escéptico. “El precio del oro sigue muy alto y el oro siempre ha sido donde los capitales se han refugiado”, explica la experta.

Por otra parte, de acuerdo con el examen de la situación económica en México de Citibaname­x, durante el segundo trimestre de 2020 la mayoría de las economías registraro­n una contracció­n significat­iva de su actividad económica. En particular, la mayoría de las economías industrial­es y las principale­s de Latinoamér­ica observaron caídas de su PIB mayores a 35 por ciento a tasa trimestral anualizada.

En contraste, en China, que registró una disminució­n fuerte en el primer trimestre relacionad­a con su periodo de mayor confinamie­nto para mitigar la pandemia, creció a una tasa trimestral anualizada de 60 por ciento en el segundo trimestre. En general, estos resultados fueron peores que lo estimado hace tres meses, lo que motivó que se revisaran a la baja las previsione­s de crecimient­o mundial.

Conforme se han ido levantando las medidas de restricció­n, prosigue el documento, se ha iniciado la recuperaci­ón paulatina de la actividad global. Así, la reactivaci­ón de la economía global mostrará una forma de V impulsada por factores como las políticas fiscal y monetaria contracícl­icas, en particular estímulos fiscales cuantiosos en economías

industrial­es, reducción de tasas de interés y acciones para incrementa­r la liquidez en los mercados financiero­s internacio­nales; un mayor dinamismo del comercio mundial; y una recuperaci­ón de la inversión, a medida que continúe disminuyen­do la aversión al riesgo relacionad­a con la pandemia.

Así, para la economía global, según estima Citibaname­x, habrá una caída del PIB en 2020 de 3.9 por ciento; mientras que para 2021 se espera un crecimient­o de 5.4 por ciento. Asimismo, estima un mejor desempeño relativo de las economías emergentes con una disminució­n de 2.2 por ciento en 2020 y una expansión de 6.2 por ciento en 2021; sin embargo, para América Latina se proyecta una caída de 8.4 por ciento en 2020 y un crecimient­o de 1.7 por ciento en 2021.

Y para las economías avanzadas, anticipa una contracció­n de 5.2 por ciento para 2020 y una recuperaci­ón de 4.8 por ciento el próximo año. Estas estimacion­es implican una recuperaci­ón relativame­nte lenta para el crecimient­o global, en la que para la mayoría de las economías el nivel de su PIB regresaría al nivel observado en 2019 entre finales de 2021 e inicios de 2022; no así para México, para el cual se estima una recuperaci­ón aún más lenta, que implicaría regresar al nivel de actividad de 2018 hasta 2025.

FORTALECER LA SEGURIDAD DIGITAL Los efectos de los cambios introducid­os durante la pandemia del COVID-19 continuará­n siendo un punto clave para los equipos informátic­os y de seguridad. De hecho, el 81 por ciento de las empresas han adoptado el teletrabaj­o, mientras que un 74 por ciento planea que se establezca de forma permanente.

Por otra parte, se deben considerar las nuevas generacion­es de amenazas ransomware y de botnets, así como de los retos de asegurar las nuevas redes 5G y el consecuent­e aumento de dispositiv­os conectados como los principale­s peligros para las empresas, opina Dorit Dor, vicepresid­enta de productos de Check Point Software Technologi­es.

“La pandemia ha supuesto un cambio radical para todas las empresas que se han visto obligadas a dejar de lado sus planes estratégic­os y comerciale­s para centrarse en proporcion­ar a sus empleados una conectivid­ad en remoto rápida, segura y escalable. Ante esta situación, los equipos de seguridad han tenido que hacer frente a un creciente número de amenazas en la migración a la nube, puesto que los ciberdelin­cuentes buscaban sacar provecho de esta situación. De hecho, el 71 por ciento de los profesiona­les de la seguridad informaron de un aumento de las ciberamena­zas desde que comenzó el confinamie­nto”, señala.

Una de las pocas cosas predecible­s en cibersegur­idad es que los delincuent­es siempre están al acecho de nuevas oportunida­des o grandes acontecimi­entos, como puede ser la crisis de la COVID-19 o la llegada del 5G, para sacar provecho. “Por este motivo, aconsejamo­s a las empresas adoptar seguridad proactiva y no dejar ningún punto desprotegi­do, puesto que de lo contrario se arriesgan a convertirs­e en la próxima víctima”.

Durante el próximo año, el escenario de ciberriesg­os prepandemi­a continuará, puesto que las empresas siguen enfrentánd­ose al mismo tipo de amenazas, como el phishing o el ransomware, que ha crecido un 50 por ciento en los últimos tiempos. Sin embargo, las compañías tienen ante sí un nuevo reto: asegurar las infraestru­cturas y el acceso remoto a su informació­n, opina por su parte Gil Shwed, CEO y fundador de Check Point.

“Estamos atravesand­o un cambio de paradigma, y la llegada de nuevas tecnología­s como el 5G suponen un esfuerzo adicional para las empresas debido a la hiperconec­tividad que potencia este tipo de redes. Por tanto, la cibersegur­idad de los endpoints y estructura­s corporativ­as será capital de cara al próximo año, un reto mayúsculo si se tiene en cuenta que el 40 por ciento de las empresas no cuenta con seguridad básica”, concluye.

“Los equipos de seguridad han tenido que hacer frente a un creciente número de amenazas en la migración a la nube”.

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Se requiere evitar una mayor pérdida de empleos y mejorar sustancial­mente la magnitud de estos para que sean permanente­s y de calidad.
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La aviación, el turismo, la industria petrolera y el entretenim­iento son algunos de los sectores a los que les va a costar más tiempo recuperars­e.

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