Blindan el rastro en Torreón: Raúl Méndez
Aquí en La Laguna se cuenta con un cuidado estricto en las granjas porcinas
Luego de que hace unos días la peste porcina africana comenzara a magnificarse en China con el sacrificio de hasta un millón de animales, las acciones de prevención, sanidad y cuidados a nivel nacional y local se han extremado, tal es el caso del Rastro Tipo Inspección Federal en Torreón donde los filtros de recepción y matanza se han blindado por completo con la participación de personal veterinario de SADER, SENASICA y del propio rastro donde se sacrifican en promedio hasta 750 animales por semana, confirmó su titular Raúl Méndez Orozco.
Lo que comenzó con unas pocas docenas de cerdos muertos en el noreste de China se está expandiendo por toda la cadena alimen
taria mundial, resaltan en las noticias a nivel internacional, y de ahí que todos estemos obligados a cerrar el cerco sanitario para evitar esto llegue a nuestro país y en este caso a la zona de La Laguna.
Méndez Orozco dijo que afortunadamente
a su llegada al Rastro Municipal le permitió erradicar algunos vicios que existían y que demeritaba la calidad de matanza que ahí se tenía, esto se acabó y ahora todo animal que es sacrificado cuenta con la certificación del SADER, SENASICA y de nuestros médicos veterinarios, destacó.
Se estima que en La Laguna, la granja porcina MUMA es la más importante y la cual reúne las condiciones de inocuidad y sanidad más estrictas que se puedan imaginar, a ese lugar no entra cualquiera y por ello que la calidad de sus productos son de importación, preciso el director del rastro en Torreón.
Conocemos del problema que existe en Asia, particularmente en China, uno de los países de mayor consumo de carne de cerdo, y por ello estamos blindando todo lo referente a la recepción y matanza de cerdos, destacó.
PORCENTAJE
En agosto pasado se encontró que una granja con menos de 400 cerdos en las afueras de Shenyang albergaba peste porcina africana, la primera aparición de la enfermedad viral contagiosa en el país asiático que tiene la mitad de los cerdos del mundo. Cuarenta y siete cabezas murieron, lo que provocó medidas de emergencia que incluyeron el sacrificio masivo y un bloqueo para detener el transporte de ganado. En unos días, un aviso del gobierno proclamaba que el brote había sido "efectivamente controlado".