El más alto de Reforma
El nuevo inquilino de una de las arterias principales de la Ciudad de México ha enfrentando con éxito retos como la cimentación o el uso de concreto.
La Torre Reforma se convertirá en el rascacielos más alto de la Ciudad de México, presentamos siete retos que lo develan.
MPOR ANASELLA ACOSTA
over una casa como quien mueve un vaso de agua sobre una charola fue la fórmula que dio al arquitecto Benjamín Romano el visto bueno de un grupo de inversionistas para diseñar el que será el edificio más alto de México: la Torre Reforma, de 244 metros, altura que alcanzará hacia el segundo semestre de 2015.
El artífice de este nuevo ‘ habitante’ instaló una oficina temporal en el primer sótano de la construcción, que cambia la fisonomía de Reforma 483.
Las paredes están tapizadas con planos que dan cuenta de alturas, perfiles, groso- res; un relato gráfico del desplazamiento temporal de la casona de la primera mitad del siglo XX que fue precisó realizar para dar cimiento a la torre y que ahora es un atractivo potencial de la planta baja del rascacielos de oficinas; de hecho ya cuenta con un par de clientes para activarla como área de comercio: Starbucks y Mac Store.
Durante más de 30 años Romano ha guiado a cientos de alumnos como profesor de la Universidad Iberoamericana, su alma mater. Ahora lo hace con Obras, y da cuenta de al menos siete retos que ha resuelto en esta torre que ya es parte del nuevo perfil de la Ciudad de México.
EL ‘MILAGRO’ DE MOVER CASAS
La casona del número 483, en Reforma, sobre la que hoy se levanta la torre ideada por Benjamín Romano, está catalogada como patrimonio. Fue diseñada con estilo neogótico por petición de los dueños y construida en 1929 fuera de toda la tendencia arquitectónica de la época.
El arquitecto, líder del despacho LBR, dice en voz baja: “A mí personalmente no me gusta, pero si representa un patrimonio cultural por qué quitarlo”. La visitó en 2011 con la misión de resolver el problema de su ubicación. Entonces era rentada como un antro llamado ‘El divino’. El arquitecto observó a un mesero levantar una charola con vasos y perderse. En ese instante tuvo la idea.
“¿Por qué no hacemos una charola como la de un mesero y transportamos la casa?”, dijo a Roberto Meli, director del Instituto de Ingeniería y quien se encargó de enderezar La Catedral Metropolitana, y a Enrique Santoyo, director de TGC, firma especializada en estudios de mecánica de suelo.
La edificación patrimonial fue movida 18 m atrás el 13 febrero de 2012; el proceso duró 10 horas. Luego Cimesa hizo los muros milán, “llegamos a la cota menos 62, seis semanas después regresamos la casa”, comenta Romano.
Meli insistía en que la losa que transportara la casa debía ser tan rígida que no tuviera un movimiento diferencial de más de 5 mm. “Hicimos la charola muy rígida, pero ahí venía el problema de cómo moverla”, relata Romano. Entonces decidieron contactar a la empresa española Ale Heavylift, dueña de unos carritos que los griegos emplearon para transportar el techo de un estadio y concluirlo a tiempo, y quienes además trajeron unos gatos hidráulicos computarizados que detectan movimientos diferenciales y corrigen de inmediato las elevaciones para tener un desplazamiento uniforme. Ésa fue la clave para el éxito de mover la casa con todo y cimientos, “sin un cristal roto”.
CON PIE FIRME
Mover la casa sirvió para hacer los sótanos de estacionamiento, que también se convirtieron en “la cimentación misma”, dice el arquitecto. Los ingenieros de Arup, responsables de la estructura del edificio y de la cimentación, “entendieron que la penetración de esos muros en la capa dura del terreno era suficiente para sostener el edificio”, explica el líder del despacho LBR, y detalla que la torre está apoyada en la cota menos 62 rígidamente por los muros milán perimetrales y otros perpendiculares, y por la losa sólida de 2.5 m de peralte.
Sin temer que le roben el secreto, comparte que la subpresión es enfrentada con los cimientos, pero también con un sistema de impermeabilizantes “muy interesantes que importamos de Estados Unidos”, llamados Grace.
De acuerdo con el arquitecto, la impermeabilización es “un sistema complejo” por debajo de la losa de fondo, el producto importado fue adherido al concreto “y no se puede romper”. La prueba es que “llevamos ya dos años con esa cimentación y nunca hemos tenido filtraciones de agua”.
El costo de la Torre Reforma se ha calculado en más de
100 millones de dólares.
AL SON DE UN SISMO
El arquitecto Romano recibió el Primer Lugar al Edificio Inteligente en 1993, otorgado por la Intelligent Building Association con sede en Chicago, Illinois, por la construcción de la Torre Chapultepec, ubicada en la Colonia Polanco, DF. Con esa autoridad, explica por qué Torre Reforma no posee gatos hidráulicos para enfrentar los terremotos tan comunes en México.
Los muros de concreto hacia arriba, con forma de un ‘libro abierto’, están perforados, lo que además de ser una interpretación plástica es un requerimiento estructural para el sismo. “Arup me pidió dejar esas perforaciones cada cuatro pisos de triple altura”, pues la firma de ingeniería asume que permitirán liberar energía y dejarán que la construcción se mueva en un sismo, como debe ser, para recuperar la estabilidad muy rápido. Así concentrarán el movimiento los tres muros de concreto (dos a 90° y otro interior a 45°, que generan una columna triangular en la parte posterior del edificio).
Romano refiere que Arup “hizo un estudio muy detallado y muy caro” para decidir la necesidad de amortiguadores sísmicos; concluyó que no era necesario porque esta columna es muy rígida, “como todo triangulo”; tiene 57 niveles más nueve hacia abajo y “funciona como las vértebras de un cuerpo”, compara.
ADIÓS A LAS COLUMNAS
Los pisos no poseen columnas interiores, son espacios libres que penden de estructuras de acero, suspendidas de los muros de concreto. Se trata de un sistema conocido como Diagrid (estructuras colgantes), en el que todo sale a partir de una escuadra y se sostiene por un sistema de tensores, a manera de un corsé, explica el arquitecto Aarón Kababie, supervisor de obra de LRB, quien fue alumno de Benjamín Romano en la Universidad Iberoamericana, igual que los otros 12 arquitectos que hoy conforman ese despacho.
Los muros que sostienen las estructuras de acero tienen 1.22 m de ancho, medida que se va adelgazando hacia arriba, donde sólo tiene 35 cm. La diversidad de espesores responde a especificaciones de Arup.
Cada nivel es distinto, el punto intermedio de los 45° de la fachada, en la planta baja, se va desplazando hacia la calle Río Elba, y en cada piso hacia arriba. Lo complicado, dice su artífice, fue que esa superficie alabiada se hiciera mayormente con cristales de 1.05 x 2.10 m, los únicos paneles distintos están en las uniones.
- Arq. Benjamín Romano
“El precio es relativo. Si fuera caro no sería negocio, si no fuera negocio los bancos no le darían el crédito. Las cosas son muy claras”:
LOS TONOS DEL GRIS
Más allá de la fachada acristalada que permite vistas libres del Bosque de Chapultepec, Reforma, la Estela de Luz, la torre Bancomer con su emulación al papel picado morado y el rosado de la Torre Mayor, el resto es concreto puro. Benjamín Romano define la apariencia de los muros de concreto de la Torre Reforma “como un pirulí”, en referencia a las “tiritas horizontales que simulan un patrón de tonos degradados, lo que estima como un acierto ante los retos que implica el uso de concreto aparente.
“Todo concreto en el mundo cuando se somete a tensión se agrieta, no quiere decir que se va a caer, pero se agrieta” y varía su color en función de las condiciones atmosféricas y “del humor” de cuando se hace la mezcla de concreto, explica.
Por esa razón pidió a la constructora que hiciera tiras de 70 cm de altura y que el colado se realizara una vez al día monolíticamente; es decir, que en dos o tres horas avanzaran 70 cm. Esto sólo se hace por las noches “para que no nos agarre una manifestación y tengamos que parar el colado”.
Estas pequeñas decisiones se han traducido en una apariencia matizada, que no desarrolla grietas y trabaja con el cambio de color, “si hubiera puesto manchas de concreto se vería catastrófico”, apunta el arquitecto. En consecuencia, el diseño de la cimbra EFCO, de 70 cm, fue otro reto. Cada piso tiene seis tiras, entonces son seis días de colado a la semana.
Romano explica que la junta cada 70 cm también servirá para que en caso de sismos las grietas tomen ese camino. Además, precisa que la torre es un conjunto de 14 edificios de cuatro pisos eléctrica, hidráulica y espacialmente, y cada tanto “tenemos jardínes de triple altura”.
Para el diseño de esa piel modular, el arquitecto se valió del software Grasshopper, que permite emular el comportamiento de la naturaleza en pieles.
UN ESPACIO PARA 4,500 PERSONAS
Cada piso tiene entre 750 y 1,000 m2. El programa arquitectónico contempla una persona por cada 12 m2. La superficie total de construcción es calculada en más de 83,000 m2. Así, la capacidad es estimada en cerca de 4,500 personas.
Para permitir el flujo de quienes laborarán en este espacio, dividieron en dos el edificio: los cuerpos medios y altos, y los cuerpos bajos y sport. Para llegar al sport se entrará por un nivel debajo de la planta, y para los bajos habrá que subir a un primer piso para de ahí distribuir. Para los medios y los altos, habrá elevadores rápidos de una sola parada en el piso 23, ahí estará un skylobby, al que llegan todos los pisos, incluso los low rise.
“Porque si quisieras confluir a todos por la planta baja y el mismo elevador, es un conflicto, cosa que pasa en muchos edificios, incluyendo la Torre Mayor”. En contraste, aquí los flujos están divididos, una vez que llegas a planta baja hay salidas peatonales por Río Elba, Reforma y, en caso de emergencia, también por Río Atoyac.
ESTACIONAMIENTO INTELIGENTE
“Movimos la casa ( patrimonio) por una razón: la normatividad de la Ciudad de México en el término de cajón de estacionamiento, que creo que es un error, es muy alta”; tuvimos que cumplir con 1,100 cajones, detalla sobre este punto el diseñador de este nuevo inquilino de Reforma. “Si no usaba el espacio bajo la casa, me quedaba un estacionamiento mal resuelto”. Habría tenido que ocupar pisos superiores, dice, como la torre Bancomer, o más sótanos, como la Torre Pedregal, de Teodoro (González de León), quien hizo 16. La Torre Reforma tiene nueve, para más de 600 coches. El espacio faltante fue resuelto con un estacionamiento robótico.
En la Torre Reforma hay cuatro robots que permiten redundancia y flujo a la demanda. El sistema es de origen alemán. La función es sencilla: llegas, te paras, agarras tus llaves, cierras y te vas; el robot lo toma y lo lleva a un cajón. A la salida , el coche es entregado con un máximo de 90 segundos. “La ventaja es que de coche a coche hay menos distancia; no tienes que abrir puertas, eso hace más eficiente el espacio”.
El desarrollo de viviendas sostenibles es un factor estratégico para México, ya que además de mejorar el bienestar de las familias, incide de manera directa en el crecimiento económico nacional. En particular, el sector de la construcción juega un papel clave al detonar inversiones, generar empleos, preservar el medio ambiente y fortalecer el mercado interno.
Rotoplas, La empresa mexicana productora de sistemas de almacenamiento, conducción, purificación y tratamiento de agua, ha trabajado durante los años recientes en el desarrollo de innovadoras soluciones individuales e integrales, que además de ser amigables con el medio ambiente, resultan redituables para la industria de la construcción al evitar la degradación del entorno y contribuir a incrementar su valor comercial.
La nueva Política Nacional de Vivienda presentada en 2013, cuyo objetivo ha sido conducir los esfuerzos públicos y privados para promover el desarrollo urbano sustentable e inteligente, reducir de manera responsable el rezago del sector y procurar una vivienda digna para los mexicanos, ha encontrado resonancia en una industria orientada a la optimización de los recursos naturales y la construcción de edificios de bajo impacto sobre el medio ambiente.
En este sentido, Rotoplas ha enfocado sus procesos de Investigación y Desarrollo en tecnologías que permitan a la población tener mejor calidad de vida, con materiales más eficientes, ligeros y adaptables a los diversos entornos, que además son de fácil instalación y mantenimiento, lo que favorece la construcción de inmuebles sustentables.
La contribución de Rotoplas en el crecimiento y desarrollo de este sector es una amplia línea de soluciones diseñadas para resolver cada necesidad relacionada con el cuidado del agua. Para la empresa, acompañar al agua significa aprovecharla desde la lluvia, conducirla sin desperdiciar una gota, abastecer hogares y edificios enteros, almacenarla y conservarla intacta, tratarla para ser reutilizada y purificarla para consumo humano.
Entre los productos durables y eficientes que Rotoplas produce para garantizar agua de la mejor calidad, se encuentran las Plantas Purificadoras desarrolladas como proyectos a la medida que hacen posible el consumo de agua de lluvia, pozo y red municipal, a partir de su proceso de purificación y desinfección cubriendo las necesidades de un conjunto residencial al tener una capacidad equivalente al consumo de 1,000 a 6,000 personas.
Por otra parte, Sistemas como el de Captación Pluvial y la Tubería Hidráulica, optimizan los costos de construcción y agregan valor a las edificaciones. El primero, recolecta y almacena agua de lluvia para su reutilización sanitaria (wc) y riego, lo que permite un ahorro hasta del 30% de agua potable, al tiempo que garantiza contar con abastecimiento en caso de no tener acceso a ella. En tanto que Tuboplus, la línea de Tubería Hidráulica de Rotoplas, elaborada con PP- R (Polipropileno Copolímero Random) es el aliado perfecto para lograr edificaciones sustentables, por lo que aporta puntos para la Certificación LEED, debido a sus características distintivas como la garantía “cero fugas”, que fusiona las uniones convirtiéndolas en una sola pieza de gran resistencia, ligereza y durabilidad, gracias a su avanzado sistema de termofusión.
El tema de la vivienda en México comprende el entorno rural y urbano, así como la atención a grupos vulnerables. Bajo este enfoque, a través de su Centro de Investigación y Desarrollo, Rotoplas diseña soluciones funcionales orientadas a mejorar la calidad de vida de los mexicanos, como son el Biodigestor Autolimpiable, una solución patentada de saneamiento para viviendas que no cuentan con servicio de alcantarillado. Éste funciona mediante la captación de las aguas residuales domésticas y realiza un tratamiento primario del agua, con un desempeño más eficiente que una fosa séptica tradicional. También cuenta con Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR), sistemas que tratan los contaminantes físicos y biológicos presentes en el agua residual sanitaria, favoreciendo la preservación de este recurso, ya que es posible reutilizar el agua tratada en lavado, riego o reintegrarla a cuerpos de agua. Gracias a su funcionalidad y buen desempeño, ambos suman puntos para la Certificación LEED.
El trabajo conjunto de los sectores público y privado contribuye a fortalecer una industria que está construyendo mejores viviendas, en lugares adecuados, con las características correctas y con mejores condiciones para sus habitantes. Bajo este escenario, compañías como Rotoplas resultan aliados naturales para lograr que las nuevas viviendas sean consideradas sustentables y que las familias mexicanas cuenten con un patrimonio que les permita mejorar su calidad de vida.
y sillas de jardín, equipadas con pizarrón interactivo, pantallas led y muros de pintura tipo pizarrón, precisa el arquitecto Xavier Montoya.
También contempla 420 m² de oficinas para renta, taller de prototipado equipado con fresadora con control numérico computarizado (CNC) e impresoras 3D, auditorio para más de 300 personas, cafetería, huerto urbano, salones de juego ( billar, ping-pong, videojuegos, minigolf ), tres salas de juntas, espacio de cowork (trabajo en equipo) para 250 personas, showroom, estudio fotográfico, de video y broadcasting, gimnasio, mediateca y 24 cajones de estacionamiento.
La inversión de la obra (construcción con equipamiento) fue de 10 mdp (2,631 pesos/m²). El bajo costo se debió al uso de materiales y técnicas acordes a una tipología industrial: las instalaciones aparentes evitaron el uso de cubiertas.
El proyecto ejecutivo incluyó modificaciones estructurales y de ingenierías. La construcción se dividió en tres etapas.
La parte operativa fue la primera en ser inaugurada. Alberga el edificio administrativo y de staff: dirección general, dirección de finanzas, mercadotecnia, patrocinios y las oficinas de fondos de inversión estratégicos. Todo esto es como la médula espinal de SUM.
La nave industrial fue dividida en dos partes: la planta baja, que cobija los cubículos privados y las salas de juntas; y el tapanco, con un área de coworking.
La mutación
La transformación de la bodega se apegó a un estilo industrial, donde lo nuevo se hizo aparente. “Nunca se quiso ocultar el hecho de que es una bodega, al contrario, fue resaltada su naturaleza, pero con un toque contemporáneo”, platica a Obras Xavier Montoya.
Usaron el material existente en las bodegas. Más de 40 toneladas de estructuras de acero que estaban originalmente habilitadas como anaqueles fueron desmontadas y separadas para aprovecharlas en la construcción. También fueron reciclados entre 20,000 y 30,000 tablones de madera. Ambos materiales sirvieron para fabricar casi 700 m² de tapancos y plataformas que integran y conectan a todas las áreas y espacios del proyecto. La madera sobrante fue aplicada en pisos y mobiliario.
Para reducir costos, optaron por diseñar y fabricar todo el mobiliario dentro de la obra. Fueron restauradas mesas y sillas Herman Miller de segunda mano, y habilitados talleres de herrería y carpintería.
Parte de la idea lúdica incluyó una playa artificial de 120 m2, con arena real traí- da de la costa de Guerrero, sillas de playa tipo Acapulco y hamacas de origen yucateco. Una de las empresas incubadas en SUM recreó mediante un proyector 3D el vaivén de las olas, que es proyectado en la arena para dar mayor realismo.
La permeabilidad visual es cualidad y todos los espacios son abiertos. Los privados, las oficinas personales y las salas de juntas están acristalados con la intención de favorecer la interacción entre los distintos equipos de emprendedores y crear un ambiente proactivo y de comunicación, explica el arquitecto Montoya.
Las pymes generan 70% del empleo en el país y 52% del Producto Interno Bruto. FUENTE: SECRETARÍA DE ECONOMÍA Y CONSEJO COORDINADOR EMPRESARIAL
De acuerdo con Analucía Cuéllar, maestra en Administración de Empresas por el Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE), y ‘startuper’ de la primera generación, en el área de coworking “recibes retraolimenatción constante y es una buena experiencia para conocer personas y hacer sinergias; todo gracias a que hay más contacto”. Comenta que la privacidad no se extraña, y si en algún momento quieres despejarte, puedes subir al roof garden a caminar.
Además del trabajo de diseño y la construcción, el arquitecto Montoya es el res- ponsable del mantenimiento del inmueble y cualquier adecuación requerida, “de esta manera nos aseguramos de que cualquier nueva área que se proyecta y se construye tenga una concordancia arquitectónica con todo lo demás”, asegura.
El cliente y el arquitecto coinciden en que el mayor reto fue resolver el programa en cinco meses, porque SUM iniciaría operaciones en ese tiempo. “Tuvimos que trabajar bajo el esquema project build ( proyectar mientras construyes), esa es una de las cosas más complicadas que hay”, dice Montoya de la Isla.
Explica que lo más complejo fue la coordinación entre los equipos de diseño y de campo; la mayoría de los detalles de diseño se resuelven en obra. “Nuestro equipo de diseño se instaló en la obra para tener interacción total con la gente de ahí. Conforme era resuelta alguna área, se imprimían los planos ahí mismo y de inmediato eran entregados al personal de campo”.
La premura los obligó a dividir la obra en tres áreas separadas físicamente con tapiales, cada una con fecha de entrega diferente. El desarrollo de las instalaciones aún continúa.
Hasta marzo de 2015, en el Programa de Incubación en Línea el INADEM contaba a 15,000 jóvenes de entre 18 y 30 años en busca de recibir apoyo para la creación de una empresa. FUENTE: SECRETARÍA DE ECONOMÍA Y CONSEJO COORDINADOR EMPRESARIAL
no había; el lugar estaba muy abandonado por su carácter industrial.
Sobre la Ampliación Torreblanca afirma: “Es una colonia emergente por su ubicación y conexión con el resto de la ciudad... En poco tiempo veremos nuevos desarrollos que revitalicen la zona. SUM ha sido un parteaguas”.
Una visión sostenible
El arquitecto Montoya lamenta no haber aprovechado 3,000 m² de azotea para colocar paneles fotovoltáicos, pues según los estudios que realizaron, la estructura no soportaría el peso. Para compensar un poco, toda la iluminación se realizó con lámparas led para un menor cosumno de energía y la ventilación natural evitó el uso de equipos de aire acondicionado.
En cuanto al ahorro de agua, los baños cuentan con mingitorios ahorradores. Y en ese tema, una de las empresas de SUM tiene dentro del campus una planta purificadora de agua con un nuevo y patentado sistema de iones, esa agua es destinada al consumo en el campus.
Como prácticas de inteligencia, destacan la conectividad y el Internet con fibra óptica, que dota al edificio en su totalidad de una navegación de 200 Mb/s vía inalámbrica (Wi-fi); y la seguridad, que con-
templa 40 cámaras como parte del sistema de CCTV que cubre prácticamente hasta el último rincón del inmueble. Además, todo el complejo está dentro del Programa de Alarmas Vecinales de la Secretaría de Seguridad del DF, y en comunicación directa con el centro de control y mando de dicha dependencia.
La tasa de crecimiento de las pymes pasó de 3.7% en el periodo de 2004 a 2008, a 1.9% entre 2009 y 2014. FUENTE: SECRETARÍA DE ECONOMÍA Y CONSEJO COORDINADOR EMPRESARIAL
FICHA TÉCNICA PROYECTO: Startup México (SUM) TIPO DE PROYECTO: Oficinas / Cowork / Talleres UBICACIÓN: Calle Ignacio Allende 21, Col. Ampliación Torreblanca, Miguel Hidalgo, México, DF SUPERFICIE: 3,800 m2 PROYECTO: Xavier Montoya de la Isla COLABORADORES: Tai Eugenia Cardel CONSTRUCCIÓN: XM Construcciones INICIO DE OBRA: Abril 2014 TÉRMINO DE OBRA: Noviembre 2014