Apagón halógeno
Europa le dijo adiós a los focos halógenos, mientras México avanza en la transición hacia tecnologías más eficientes.
Con el objetivo de lograr una mayor eficiencia y sostenibilidad, la Unión Europea prohibió la fabricación e importación de focos halógenos para propiciar su sustitución por otros de mayor eficiencia energética. Con esta medida, la Comisión Europea espera generar un ahorro energético de 40,000 millones de KWH al año a partir de 2020, una cifra que equivale a la demanda eléctrica de 11 millones de hogares.
La transición comenzó en 2010, con las bombillas de bajo consumo, a las que siguieron las led.
“Existen muchos obstáculos en el diseño e implementación de regulación en materia de eficiencia energética. No obstante, la realidad del cambio climático impone la descarbonización de la economía”, valora Benoît Lebot, director general del International Partnership for Energy Efficiency Cooperation, que trabaja con países del G20, del cual México forma parte.
Aunque el país americano todavía no se encuentra en esa fase, Humberto García, responsable del Laboratorio de Iluminación y Eficiencia Energética del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica, estima que en cinco o 10 años se habrá dado esa transición. “En 2010 el retorno de la inversión era de 11 años; ahora el retorno en hogares se ve a cuatro años. Se redujo el costo y se aumentó la eficacia”.
En 2015 se publicó la Ley de Transición Energética en el país pero, de momento, no contempla la obligatoriedad del uso de led. “No se ha discutido de manera formal, porque un cambio de esa naturaleza implicaría un alto costo para los gobiernos municipales, pero se irá dando paulatinamente; hay un mercado todavía muy, muy grande por atender”, agrega García.
Mauro Anastasio, vocero de la European Environmental Bureau (EEB), coincide en que tanto México como, en general, América Latina comenzarán más pronto que tarde la obligación de emplear tecnologías como led, que permiten un ahorro energético de entre 80 y 90%.
Las ventajas de la transición
En Europa, el impulso de la normativa se debe, en parte, a la reducción del precio de las nuevas tecnologías, que desde 2012 cuestan 85% menos que cuando salieron al mercado, aunque siguen siendo más costosas que un foco convencional, explica Anastasio.
El experto señala que para llegar a este paso, “los fabricantes invierten en led de alta eficiencia desde hace muchos años y todas las grandes compañías europeas cuentan con divisiones dedicadas a este tipo de bombillas”. Por ejemplo, Philips Lighting publicó que 68% de sus ventas totales en el primer trimestre de 2018 provinieron de esta tecnología.
Ricardo Pomatta, director técnico de la Asociación Española de Fabricantes de Iluminación, señala que “los fabricantes han estado desarrollando tecnologías, adelantándose a la entrada en vigor de la normativa para que el sector se acostumbrara y el cambio no fuera tan traumático”.
Europa no es la única región que busca la transición. Australia seguirá el ejemplo y prohibirá la venta de bombillas halógenas a partir de 2020. También en Estados Unidos el tema está en discusión.
90% es el ahorro de energía de un foco led en comparación con una bombilla tradicional
25,000 horas de vida útil tienen los led, 25 veces más que un foco convencional
4 años es el periodo promedio de retorno de inversión en hogares
85% es lo que se ha reducido el costo de focos led en los últimos seis años