LA LUCHA LIBRE ESTÁ DE GALA...

¿Qué? Ya muy contentitos porque regresó la lucha libre a la Ciudad de México, ¿no? Pues la neta yo también lo celebro y ayer estuve atento a la microfunción del CMLL que se transmitió por un canal de TV abierta del gobierno, luchas que por cierto no fueron en vivo, sino grabadas desde la semana pasada,

(¡cof, cof!, se los dije) sin que Televisa, socia de la ‘seria y estable’, lo supiera, ¡digo!, ahí nomás se las dejo botando y en otra ocasión profundizaré en el tema, pero de que están encanijados en Chapultepec, eso que ni qué.

Pero a ver, volviendo al tema de la lucha libre en la capirucha, muchos se preguntarán quién fue el héroe que logró esto, pese a que todavía hay un alto índice de contagios por covid y que el semáforo epidemiológico se encuentra en naranja y no en amarillo, como se supone tendría que estar para el regreso de las actividades deportivas a puerta cerrada. ¿Acaso fue el presidente de la Comisión de Lucha Libre Profesional de la CDMX?

¡Nel! Al Fantasma habrá que reconocerle que durante esta pandemia le ha echado la mano a los luchadores con despensas, medicinas y tocando la puerta de las autoridades para que les hicieran un préstamo, pero este milagrito del regreso de las planchas y los lances no se lo debemos colgar a él.

Quien en verdad hizo la luchita para volver a tener funciones fue el Departamento de Cultura del Consejo Mundial, encabezado por Gala Lutteroth, hija de Salvador Lutteroth III, actual mandamás de la empresa.

Y es que existe, desde hace tiempo, una muy buena relación con la Secretaría de Cultura de la CDMX, mediante la cual se consiguió el permiso con las autoridades sanitarias para el regreso de las luchas. Ahora bien, ya que es más que evidente que el CMLL y el gobierno capitalino están haciendo equipo, qué les parece la idea de celebrar el Aniversario 87 de la ‘seria y estable’ con una función en el mismísimo Zócalo.

¡Ojo! No estoy diciendo que vaya a pasar, nomás es pura intuición. ¿Le conviene al CMLL? Sí. ¿Al gobierno? Es una excelente alternativa para ofrecer un espectáculo con todas las medidas sanitarias necesarias, porque espacio sobra. ¿El público iría? Por supuesto, luego de casi medio año encerrado, está ansioso por volver a vivir de cerca un evento deportivo. Pos ahí está la idea, tómenla, es gratis.