Sobreviven a sismo
Pareja logra contar lo que pasó cuando se les cayó su casa encima
Jaime Tirzo Pérez y su esposa Ángela sobreviven al caer su museo familiar Atlapulquense, de San Gregorio Atlapulco, en Xochimilco, donde además de perder el Museo y acervo histórico del lugar, ellos perdieron su casa en su totalidad.
“Fue como un parpadear, en cuestión de segundos se nos vino todo abajo, sólo respiramos polvo y alcanzaba a ver un pequeñito rayo de luz”, dijo Jaime.
El pasado 19 de septiembre, Jaime Tirzo estaba con su esposa Ángela y su compadre en el Museo Familiar Atlapulquense, pero minutos antes del temblor salió su compadre a la calle, cuando empezó a sentir que todo se movió, y en cuestión de segundos ya estaban bajo los escombros.
Tirzo dijo que empezó a buscar a su esposa que estaba a unos metros de él, al sentirla, Ángela al igual que él gritaba “auxilio estamos aquí”, le dijo que le dolía mucho la espalda y en eso ella se desmayó, pensó lo peor y empezó a gritar desesperadamente “auxilio estamos aquí, auxilio por favor, compadre estamos aquí adentro”.
Se sentía impotente no sabía qué hacer sentía que el aliento se agotaba de gritar, pero tenía esperanza aunque sus fuerzas ya no le respondían como cuando era joven; su compadre buscó ayuda y vecinos llegaron corriendo y se asomaron por una ranura y sólo escuchaban el grito, la gente apurada empezó a quitar las piedras.
Un vecino y su compadre se introdujeron para seguir bus- cándolo, Tirzo percibió que una piedra se levantó y vio a su compadre, al momento de soltar a su esposa de su mano, Jaime en su antebrazo se corto muy cerca de las venas, pero eso no le importaba, él quería ver a su esposa, dijo que cuando la soltó, la señora Ángela reaccionó y le dijo, -Jaime me duele la espalda creo que estoy encima de unos periódicos.
En ese momento regresó el aliento a Jaime ya que pensaba que su esposa había fallecido, después los vecinos ingresaron y lograron sacarla, tenía un golpe en la cabeza y algo de sangre.
Además de ser el museo familiar también era una biblioteca donde tenían libros, revistas, fotografías y escritos de la historia del que antes fue un pueblo fiestero y ahora parece un pueblo fantasma.