Investigarán a príncipe saudí
La relatora de la ONU para las ejecuciones extrajudiciales, Agnes Callamard, concluyó que existen pruebas suficientes para implicar en el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi al príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamed Bin Salmán, y otros altos cargos del reino.
Así se desprende del informe que hizo público ayer y en el que recomienda una investigación internacional sobre el caso y que se impongan sanciones preventivas al príncipe. Las autoridades saudíes volvieron a rechazar las alegaciones y cuestionan la credibilidad del trabajo.
“Existen pruebas creíbles que justifican una mayor investigación sobre la responsabilidad individual de altos funcionarios saudíes, incluido el príncipe heredero”, asegura la experta de la ONU en su informe, tras subrayar que no se trata de una conclusión de culpabilidad.
“Esta investigación de derechos humanos ha demostrado que hay suficientes evidencias creíbles respecto a la responsabilidad del príncipe que exigen una indagación exhaustiva”, precisa. La relatora estima que ni la investigación saudí ni la turca cumplen los estándares internacionales.
Callamard pide a los Estados miembros de la ONU que pongan en marcha las medidas necesarias para la detención o extradición de los individuos presuntamente implicados en el asesinato de Khashoggi en caso de que pisen su territorio.
También solicita que les impongan sanciones, “incluyendo al príncipe heredero, centrándose en sus bienes personales en el extranjero, al menos hasta que se pruebe que no tiene responsabilidad” en el asunto. La relatora especial es una figura independiente que no habla en nombre de la ONU.
“Nada nuevo”, respondió el secretario de Estado de Exteriores saudí, Adel al Jubeir, portavoz habitual de la monarquía saudí.
En una serie de tuits, Al Jubeir aseguró que el informe “contiene claras contradicciones y acusaciones sin fundamento que ponen en duda su credibilidad”.