VELÁZQUEZ DE LEÓN
Después de los partidos de preparación de la pasada Fecha FIFA, Rodolfo Pizarro dijo “con Selección Mexicana he tenido 45 minutos en un año; realmente, no he tenido oportunidades”. De hecho, para esa gira contra Islandia y Croacia no tenía cabida. Fue por la lesión de Giovani dos Santos que se le abrió una nueva oportunidad. En Santa Clara, frente a Islandia, participó 13 minutos, y en Dallas contra Croacia, jugó de titular, pero al medio tiempo fue relevado. Fue su última vez con la playera de Selección en el proceso de Juan Carlos Osorio.
Su honestidad lo dejó fuera de Rusia. “Me echan la culpa, pero no sé por qué me responsabilizan por 45 minutos, cuando nadie hizo nada, ni siquiera los que tienen ahí mucho más tiempo y a los que les dan toda la confianza”, dijo el todavía jugador de Chivas, cuando México perdió contra Croacia en el estadio de los Cowboys de Dallas, dando a entender que el extraño rombo que hace el colombiano en el centro del campo no lo entiende nadie.
Pizarro no está en la lista de 28 jugadores de Osorio y los gritos de aficionados, periodistas, comentaristas, analistas y especialistas no se esperaron. Reventaron las redes sociales, donde la
Osorio entregó esta lista con honestidad y congruencia
mayoría argumenta que es injusto que un jugador desequilibrante como Rodolfo no sea tomado en cuenta. O será que le están cobrando esto: “En el sistema de Osorio, no me puedo salir a las bandas ni nada. No teníamos espacio entre los volantes. Si te fijas, me dicen mucho, pero en realidad no sé quién hizo un buen partido”. ¿Será que por hablar lo bajaron del Mundial?
Lo cierto es que Rodolfo solamente pudo aportar para lograr siete victorias en liga, durante un año, con Chivas y cinco en Concachampions. En Selección Mexicana ha jugado 646 minutos de los tres mil 690 que van disputados en la era Osorio desde octubre de 2015; es decir, es mínima la participación de este futbolista, quien fue usado generalmente cuando existían partidos fuera de Fecha FIFA. La mayor cantidad de minutos jugados fueron en la Copa Oro, donde fracasaron rotundamente.
Osorio entregó esta lista con honestidad y congruencia. Podemos estar en contra y debatir por qué no está uno u otro. Lo cierto es que cada Mundial pasa lo mismo y, si bien no sorprendió con alguna incongruencia, sí fue incongruente al no llevar a quienes están en un mejor momento futbolístico e incluir a quienes no merecen un sitio. Giovani no está ni cercano al nivel de Pizarro, como no está ningún jugador del mediocampo mexicano al nivel de José Juan Vázquez, el mejor y más rendidor jugador de la Liga MX, quien —en más de 40 partidos de Osorio— solamente jugó de verde 44 minutos.
Congruencia existe, porque estarán en el Mundial los mismos de siempre, los que Osorio —confía— le darán el quinto partido. Eso es indiscutible y entendible; por lo menos en eso sí hay transparencia. Pero si de verdad no llevaron a Pizarro por criticar un sistema en el que no se sintió cómodo o por gritar una grosería contra el América en plena celebración, eso sí sería una barbaridad.