¡Gran madre sin importar la hora!
››A unos días de la muerte de Edith González, su única hija se decide a mostrar sus sentimientos con una emotiva carta que hace pública su tío Víctor Manuel
Si para alguien ha sido particularmente difícil y dolorosa la muerte de Edith González, es para la joven Constanza.
En el programa “Ventaneando”, Víctor Manuel González, hermano de la fallecida actriz, leyó las palabras que la adolescente de 14 años escribió sobre su mamá, algunos recuerdos de momentos que pasaron juntas.
“Mi mamá fue una persona formidable. Era una excelente madre, nunca tomó como excusa su trabajo para no serlo. De pequeña me acuerdo que sin importar que tan tarde o cansada llegara de trabajar, siempre me daba un beso y, a la mañana siguiente, no le importaba que la levantara a las seis de la mañana para jugar.
“Siempre hubo un beso sin importar la hora, al igual, nunca tomó ser buena madre como una excusa para no ser una buena en su trabajo”, comienza el texto de Constanza, quien no deja de resaltar las cualidades de su madre.
“A ella le encantaba aprender, casi siempre que íbamos de viaje era mi guía de turistas y, si no sabía, preguntaba y aprendía. Me llevó a recorrer todo el mundo: Egipto, Galápagos, París, Londres, Myanmar, Camboya, Vietnam, Tailandia, Perú, Colombia, Canadá, Madrid, para mencionar algunos al igual que la República Mexicana”, relató.
“Recuerdo también cómo me enseñaba películas y yo a ella música, cómo nos echamos 3 mil 500 veces ‘La novicia rebelde’, por ser mi película. La hice ver ‘El Resplandor’ y ‘Psicosis’ y ella era una miedosa”, reveló, pero lo más emotivo fue el cierre de su carta.
“Cuando yo tenía cuatro mi mamá se fue a Colombia a hacer una telenovela llamada ‘Doña Bárbara’, y ella fue Doña Bárbara, la mejor Doña Bárbara.
“Mamá, aunque Doña Bárbara es un personaje muy fuerte, independiente y macho, ya hubiera querido ser la mitad de mujerón que fuiste tú, porque a comparación de ella, en vez de enfrentar al mundo con odio, lo venciste con amor. Te amo, mamá”, finalizó la joven.
››Me acuerdo que siempre me decía algo como: ‘la carta de resignación de un actor es la muerte’, y así lo hizo.‹‹
Constanza Creel, hija de Edith González.