Dicen adiós a escolta
» Encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública, dijo además que brindarán todo el apoyo a la familia del escolta Ulises Ramírez Andrade
Parientes, amigos y colegas se reunieron ayer en el panteón Jardines del Tiempo Delta para despedir a José Ulises Ramírez Andrade, el agente de la policía municipal leonesa asesinado el martes en Irapuato. Benjamín Gallo, el encargado de despacho de mayor rango en el elenco de funcionarios provisionales que se encarga de la seguridad de la ciudad, prometió que el crimen no quedará impune.
No quedará impune el asesinato de José Ulises, aseguró el encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública, Bernardo Gallo.
Ayer, el agente leónes José Ulises Ramírez Andrade, asesinado el martes en Irapuato, fue despedido por última vez.
Luego de ser velado en su domicilio, el cortejo fúnebre partió rumbo al panteón Jardines del Tiempo Delta, con la presencia de familiares y compañeros tanto de la Policía Municipal como de Tránsito Municipal a bordo de sus motocicletas y patrullas.
“Este camino de servicio fue cortado de manera alevosa, vil y cobarde. Lo dijimos desde el momento del hecho y lo refrendamos hoy: esto no quedará impune y trabajaremos arduamente para lograr el esclarecimiento de esta situación”, dijo a los presentes Bernardo Gallo, encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública.
“Garantizamos todo el apoyo y solidaridad a la familia de José Ulises, hagamos honor al trabajo realizado por nuestro compañero”, agregó.
José Ulises fue asesinado mientras cuidaba a la esposa del ahora ex director de Planeación y Administración de la Secretaría de Seguridad Pública, Mario Alberto Martínez Razo, en el municipio de Irapuato.
Ingresó a la corporación en septiembre de 2001, y “se caracterizó siempre por ser un colaborador entregado, disciplinado, trabajador, pero sobre todo con una vocación reconocible”, dijo Bernardo Gallo.
Recordó que apenas en abril de este año y después de varios intentos, había conseguido su ascenso en la corporación luego de pasar casi 18 años en la Dirección de Tránsito Municipal de León.
Después de la guardia de honor, llegó el pase de lista en el que se refirió a “mi oficial, amigo y compañero, José Ulises Ramírez Andrade”, “presente” respondieron sus compañeros para que después lo despidieran con el sonido de las sirenas de las patrullas.
Le siguió la entrega de la última bandera, la fotografía y la moscova a sus familiares.
En manos de la Fiscalía
En entrevista posterior, al cuestionar al encargado de despacho sobre el avance de la investigación, dijo que “de momento no podemos compartir una información precisa, puesto que esto le corresponde a la Fiscalía”.
Y respecto a posibles indicaciones a los agentes que permanecen en actividad tras este hecho, descartó que se hayan dado, pues dijo que el homicidio de José Ulises “es un hecho lamentable que surge a raíz de una decisión no consensuada y en su momento no es algo que suceda de manera habitual o rutinaria”.