Periódico AM (León)

El mercado del amor

- JORGE A. MELÉNDEZ

Las cosas que me hacen decidirme al “buscar casa son similares a cuando busco una compañera. Si me gusta ver casas y no tengo nada que hacer, sigo buscando. Si soy exigente, sigo buscando. Con una gran diferencia: la casa no tiene que amarme de regreso”.

¡Ah, chihuahua! Un extracto del libro “Todo lo que necesité saber de economía lo aprendí en sitios de citas por internet”, del profesor de Stanford Paul Oyer.

Como hoy es Día de San Valentín, entrémosle al tema del amor desde una perspectiv­a muuuy distinta.

Como el mercado del amor es muy “líquido” (no es albur, significa que hay muchos compradore­s y vendedores), Oyer asegura que se puede aprender economía al revisar cómo funciona buscar pareja en línea (ve un video en nuestros sitios).

Primero, el objetivo económico de encontrar una pareja ideal es maximizar la utilidad personal. Mmmm, demasiado abstracto. Digamos que es maximizar la felicidad esperada de la relación, ¿no?

“Los modelos de búsqueda en economía analizan pros y contras al decidir aceptar una opción de compra o seguir buscando una mejor”.

Igual en el amor. Pero a final de cuentas se opta por una pareja. A pesar de que quizá en el enorme universo de este mercado hubiese una mejor opción (aclaro, son palabras de Oyer).

Lo que sí es que hay grandes diferencia­s en el tiempo de búsqueda: unos son rapiditos y otros lentones. En términos económicos: a menor costo de búsqueda, más tiempo buscando.

Por ejemplo, a algunos les gusta buscar (¿curioseas en las tiendas o compras rapidito?). Derivan utilidad de la pesquisa.

Pero también hay quisquillo­sos que se fijan en todo. A fin de cuentas, el tiempo de búsqueda depende de la personalid­ad.

Oyer asegura que el mercado laboral es el que más se parece al de la búsqueda de tu alma gemela.

“No elijo a la mejor pareja disponible, sino a la mejor pareja que también me elige a mí”, comenta.

Los paralelism­os con el mercado laboral son notables:

1. Ambos lados buscan, evaluando sus opciones.

2. Es un proceso costoso.

3. Saben que si siguen buscando podrían encontrar a un mejor candidato que el “contratado”.

Por lo tanto, es difícil decidir. Pero el castigo de no elegir es alto: soledad o desempleo.

“Al final, la soledad es una opción tan poco romántica como el desempleo”, concluye. Muuuy interesant­e.

Bueno, hablando de citas en línea, hice un experiment­o. Creé 4 perfiles en los principale­s sitios. Dos hombres y dos mujeres. Dos jóvenes (20 a 30 años) y dos de edad media (40-50).

Para hacerlo interesant­e, los jóvenes guapetones, pero sin plata. Y los maduritos, normalones físicament­e... pero con patrimonio.

¿Sabes qué pasó? Las mujeres tuvieron mucho más suerte... y las más jóvenes, más. La chava de 24 años tuvo 701 visitas y guiños en el mes, mientras que la madura apenas 141, 80% menos.

Hombres, búsquenle por otro lado: al joven le tocaron sólo 225 visitas y guiños. Hombre maduro, trabajo duro: ¡apenas completó 61!

Hablando de citas y experienci­a, el sitio “Sex Surveys” revela que el 41% de los mexicano(a)s tiene en promedio entre una y dos parejas antes de casarse.

Un 25% tiene entre 3 y 5; un 11% entre 6 y 9; un 7% entre 10 y 14, y un 2% de a tiro echa la hilacha a volar: ¡tienen más de 20 parejas antes de sentar cabeza! Ah, pero en EU esta última categoría es enorme... ¡es el 16% de la población!

Para terminar revisemos algunas cifras del mercado del amor en México. Entre 2009 y 2018, la tasa de matrimonio­s en el país cayó 24%. ¿Y la de divorcios? Al revés: tuvo un alza del 69%.

Bueno, hasta en Estados Unidos se casan más (6.5 vs. 5.9 matrimonio­s por cada mil habitantes). Y aunque del otro lado del Río Bravo se divorcian mucho más (2.9 vs. 1.25 por cada mil habitantes), la tendencia del divorcio en EU ha caído 28% en 18 años.

No importa si encontrast­e a tu media naranja en línea o tradiciona­lmente, nunca está de más recordarle por qué te hace suspirar... sobre todo en estas fechas.

¿Ya lo hiciste?

Posdata. El acoso sexual tiene dos elementos: el abuso y el poder del acosador. La coperacha “voluntaria” a la IP es un tipo de acoso. Copelas o cuello... Terrible señal.

En pocas palabras…

“He decidido quedarme con el amor. El odio es una carga demasiado pesada”.

Martin Luther King benchmark@reforma.com

Twitter: @jorgemelen­dez

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico