› El pleito
Egresado de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería y Ciencias Sociales y Administrativas (UPIICSA), el empresario Raúl Milton Vargas Martínez recibió en 2015 de parte del IMPI el registro de la marca “FC Politécnico AC”.
Se trata de un equipo profesional de futbol que está afiliado a la Federación Mexicana de Futbol (Femexfut) para competir en la segunda y en la tercera división. Actualmente la escuadra que utiliza los colores y símbolos del IPN juega en la tercera categoría.
En un comunicado emitido el 16 de febrero de 2017, el IPN aclaró públicamente que el equipo de futbol de Vargas Martínez no pertenece ni es auspiciado por la casa de estudios. “Cualquier declaración realizada por Raúl Milton Vargas Martínez y Efrén Calvo Adame, quienes se ostentan como presidente del club y presidente de la Cámara de Comercio en China, respectivamente, se encuentra alejada totalmente de la realidad y crea consecuencias de derecho que tendrán que ser sometidas a las autoridades competentes”.
El IPN también expuso que “las declaraciones efectuadas por estas personas, en el sentido de indicar que el Instituto Politécnico Nacional participará en la Liga de Futbol de China, se encuentran al margen de la legalidad y pretenden confundir al público en general (…) cuando no cuentan con la autorización correspondiente para tal efecto”.
La institución acusó al empresario de usar y registrar los colores y emblema politécnicos para su equipo de futbol. Sin exhibir pruebas, informó que “mediante una resolución de fecha 24 de julio del año próximo, el IMPI determinó negar tal petición, bajo el argumento de que dicha marca presenta similitud gráfica en grado de confusión con las que tiene registradas válidamente el IPN en los últimos 80 años”.
La casa de estudios agregó que el 9 de noviembre de 2016 presentó una denuncia formal de hechos contra ambas personas por el uso indebido de sus colores, mascota, porra, nombre y escudo.
La acusación fue radicada en la 4ª Agencia de la Unidad de Investigación y Litigación Norte de la Procuraduría General de la República, ahora fiscalía. Aunque el IPN no ha informado en qué términos quedó la queja, Raúl Milton asegura a Proceso que el recurso no procedió porque estuvo mal planteado y no fue presentado en la instancia correcta.
De hecho, dice, “ni siquiera se lo aceptaron, por lo cual no hubo demanda. La notificación nunca me llegó por ser improcedente”.