Ejemplo de violencia
Guanajuato supone el ejemplo más extremo del tipo de violencia que vive México. “Una violencia que se alimenta de sí misma”, apunta el analista en temas de seguridad, Alejandro Hope.
“El Chapo y aquella lógica criminal es el pasado, lo que sucede en Guanajuato es el futuro de la dinámica violenta en México. Hace 20 años, crimen organizado y narco eran palabras intercambiables.
“Gente que contrabandeaba drogas hacia Estados Unidos y su conexión con las comunidades locales era tenue. Eso ha cambiado. El negocio ya no solo es el narcotráfico. Por eso la ubicación importa menos, ya no necesitas controlar la frontera o los cultivos. Si de lo que se trata es del expolio de las economías locales —la extorsión, el robo de combustible, el narcomenudeo— cualquier sitio es bueno”, añade Hope.
Alcanza violencia niveles máximos
La violencia en el Estado ha alcanzado sus niveles máximos este año. En plena pandemia y con medidas de confinamiento, en Guanajuato se ha asesinado más que antes. Las cifras oficiales registran hasta mayo 2mil 089 asesinatos, es decir, casi 14 al día. La ciudad de Irapuato ha sido considerada una de las más violentas del mundo.
Los expertos coinciden en que pretender analizar la violencia que sufre el país y en concreto Guanajuato con movimientos estratégicos de grandes carteles es simplificar demasiado el asunto.
“Hemos pasado a muchas más bandas, dedicadas a más cosas, donde la violencia se ha vuelto híper local. Hay cadenas de venganzas: me mataste a mi primo, te mato a tu hermano; esa violencia ya no tiene que ver con el origen de la disputa, se trata más de mantener el capital reputacional de los malandros [criminales]. La violencia involucra ya no solo a los sicarios, sino a pandillas con sus propias peleas”, explica Hope.