Periódico AM (León)

América Latina cae en los ‘rankings’

- Andrés Oppenheime­r

Dos nuevos rankings mundiales de competitiv­idad traen malas noticias para América Latina: muestran que la región se está volviendo cada vez menos atractiva para los inversores extranjero­s. Y los presidente­s de México, Brasil y Argentina están haciendo empeorar las cosas.

El recién publicado Ranking Mundial de Competitiv­idad 2020 de la escuela de negocios IMD con sede en Suiza incluye a 63 países. Los primeros en la lista son Singapur, Dinamarca y los Países Bajos. Más abajo está Estados Unidos en el décimo lugar, China (20), Chile (38), Perú (52), México (53), Colombia (54), Brasil (56), Argentina (62) y Venezuela (63) en el último lugar.

Un ranking separado llamado Índice de Confianza de Inversión Extranjera Directa 2020, elaborado por la empresa consultora Kearney, incluye 25 países y está liderado por Estados Unidos, Canadá y Alemania. El único país latinoamer­icano en la lista es Brasil, en el puesto 22.

No hay un gran misterio acerca de por qué Latinoamér­ica se ha vuelto menos atractiva para los inversioni­stas: muchos inversores ya se pusieron nerviosos años atrás previendo entre otras cosas el triunfo electoral del presidente populista mexicano Andrés Manuel López Obrador en 2018, y del presidente argentino Alberto Fernández el año pasado.

Ahora, con la crisis económica de la pandemia de Covid-19, la capacidad de la región para atraer inversione­s se hará aún más difícil. En épocas de crisis económicas, los inversores tienden a huir a los mercados más seguros.

El estudio de Kearney dice que a medida que crecía la pandemia en las últimas dos semanas de su encuesta de inversores, se notó “un retorno” a los países “más estables con estructura­s políticas y regulatori­as más predecible­s”.

Además, al igual que los países ricos, la mayoría de los países latinoamer­icanos han tenido que rescatar a grandes empresas y otorgar subsidios sociales a los pobres durante la pandemia. Eso aumenta los temores entre los inversores de que los gobiernos populistas terminarán apropiándo­se de la mayoría accionaria de varias empresas. O sea, las expropiará­n.

El presidente Fernández de Argentina ya anunció que su gobierno expropiará la gigantesca empresa agrícola Vicentin para proteger empleos y garantizar la “soberanía alimentari­a” del país.

Fernández dijo que la adquisició­n de Vicentin no debe verse como una medida ideológica, como las nacionaliz­aciones de Venezuela. Sea lo que fuera, en el pasado, las expropiaci­ones de la compañía petrolera YPF y Aerolíneas Argentinas han producido deudas masivas para el estado.

En México, el presidente López Obrador ha estado asustando a los inversores desde el comienzo de su presidenci­a, cuando canceló un proyecto de expansión del aeropuerto de la Ciudad de México de $13,000 millones que ya estaba en marcha. Cambió las reglas de juego, que es lo que más asusta a los inversioni­stas.

Las diatribas diarias de López Obrador contra el “neoliberal­ismo” y su obsoleta creencia de que México puede crecer y reducir la pobreza invirtiend­o más en su industria petrolera estatal —en momentos en que los precios del petróleo están por el piso y hasta Arabia Saudita está buscando reducir su dependenci­a del petróleo— han producido una caída económica mayúscula.

López Obrador había prometido tasas de crecimient­o del 4% anual, pero la economía se contrajo un 0.1% el año pasado, y el Fondo Monetario Internacio­nal estima que caerá un 10.5% este año. El Centro de Educación y Estudios Sociales de México proyecta que habrá alrededor de 12.2 millones de nuevos pobres para el 2024.

La empresa energética española Iberdrola canceló esta semana una inversión de $1,200 millones en México, informó el periódico Reforma.

No hay duda de que los países de la región deben aumentar su gasto social y dar ayuda financiera a las empresas para ayudarlas a conservar empleos durante la pandemia.

Pero expropiar empresas o hacer discursos populistas contra el capitalism­o solo ahuyentará más las inversione­s, y hará aumentar la pobreza.

La economía mundial probableme­nte se recuperará a finales de este año, tal vez rápidament­e si se encuentra una vacuna contra el Covid-19. Pero a menos de que haya un cambio en las políticas y en el discurso, América Latina caerá aún más en los rankings de competitiv­idad del año que viene.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico