Tiene Estado deuda con comunidad homosexual
Guanajuato tiene una deuda con la comunidad LGBT debido a su historia y cultura tradicional y moralista que ha enseñado a la sociedad que las personas del mismo sexo que se aman, no tienen acceso pleno a sus derechos.
Gabriela Naranjo Guevara, coordinadora de la maestría en Derecho Constitucional y Amparo de la Universidad Iberoamericana de León, defiende la necesidad de hacer visibles y normalizar a las personas con una orientación sexual diferente.
“Se nos ha enseñado en diferentes espacios como en los entornos familiares, en las escuelas y en los espacios de convivencia, que las personas LGBT no tienen por qué contar con un acceso pleno a sus derechos.
“La realidad es que se trata de personas que como cualquier ser humano en algún momento como parte de un proyecto de vida, tendrán deseos de tener un hijo, una pareja”, señaló.
A pesar de que el matrimonio entre parejas del mismo sexo es un derecho reconocido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en Guanajuato las autoridades obstaculizan este derecho, por lo que se ven obligadas a tramitar un amparo.
“De los matrimonio civiles derivan otros derechos como el acceso a prestaciones de seguridad social y el reconocimiento legal de relaciones familiares que después impactan por ejemplo en cuestiones patrimoniales”, subrayó.
Discriminación, reflejo de la educación
La coordinadora de la maestría en Derecho Constitucional consideró que la discriminación a la comunidad LGBT es un reflejo de la educación y la cultura que se convierte en una limitante para ejercer libremente su identidad u orientación sexual.
Por ello es necesario hacer visible y normalizar a esta comunidad para reconocer que son personas que tienen los mismos derechos que cualquier otra y que forman parte de la sociedad.
“Es un fenómeno social que tenemos todavía y esta discriminación contra los miembros de esta comunidad en muchas ocasiones derivan en una violencia hacia esas personas que puede terminar en asesinato por odio”, lamentó.
En Guanajuato, hace falta un trabajo importante de sensibilización, ejercicios de tolerancia y estrategias efectivas para evitar esta discriminación y construir una sociedad más diversa, plural y respetuosa.