Da un nuevo uso a la cera de abeja
Ante la contaminación que se genera en el mundo, con el desperdicio de toneladas de residuos y consumo de plástico derivados del petróleo, Sandra Martínez decidió contribuir con su granito de arena .
En pro del medio ambiente, creó su línea de velas a base de cera de abeja.
“Utilizar las velas de cera de abeja no sólo es una forma natural de sustituir las velas artificiales de parafina, sino que además se contribuye a que se conserve una bonita forma de artesanía tradicional, en contra de los grandes procesos de producción industrial”, explicó.
Sandra es médico general por profesión, pero su pasión por los productos derivados de las abejas y de las velas la impulsó a que, junto con su esposo y sus hijos, se iniciara en la elaboración y venta de las velas de cera de abeja.
“El ánimo de mi familia para iniciar este proyecto, desde que concebí la idea, de aportar algo artesanal y natural, me llevó a conocer las bondades de la cera de abeja que proviene directamente de las secreciones de estos insectos”, añadió.
Aseguró que es un material natural no tóxico, no alergénico y no cancerígeno.
Tampoco emite gases perjudiciales y se puede afirmar que no ensucia el aire, además, de no ser nocivas para el organismo, proporcionan una luminosidad más duradera ya que no se consumen tan fácilmente como las de parafina.
Además, explicó que la elaboración de las velas la cera es cuidadosamente seleccionada y procede de apicultores de León, lo que da sentido aún más grande, pues ambos coadyuvan a mejorar la economía de la entidad.
Todo el proceso de elaboración se realiza artesanalmente, manteniendo el color y el olor natural, y sin ningún tipo de tratamiento, ni aditivos que pueda alterar las propiedades de la cera, por lo que son ecológicas, lo que hace que sea la principal motivación de Sandra.
Finalmente, expresó lo siguiente, para quienes tienen la inquietud de emprender su propio proyecto.
“Tener un propósito claro llevará hacia adelante a través de los tiempos difíciles y nos ayudará a apreciar los buenos tiempos aún más.
“Pero es importante que entendamos también que no solo se trata de tener un proyecto o una idea, sino de saber cómo la podemos desarrollar de manera correcta, con plazos razonables y con una inversión que tenga sentido”, finalizó.