Llaman a detener tráfico de armas
» Insiste el canciller Marcelo Ebrard en que países que las exportan a México reconozcan el riesgo de su uso criminal y apliquen los controles necesarios
Los países exportadores de armas a México deben reconocer el riesgo de su uso criminal y aplicar los controles necesarios, insistió el canciller Marcelo Ebrard.
Previo a la visita del Presidente Andrés Manuel López Obrador a Estados Unidos para reunirse con su homólogo Donald Trump, la Secretaría de Relaciones Exteriores publicó en su revista digital interna el análisis de su titular y otros funcionarios sobre el tráfico ilegal de armas al País.
En su artículo, el Canciller aseguró que desde que asumió el cargo, el Mandatario federal le instruyó coordinar las acciones necesarias para hacer frente al flujo ilícito de armas de fuego, principalmente las que provienen de Estados Unidos.
“Confiamos en que los países exportadores reconozcan el riesgo del uso criminal de las armas y apliquen los controles necesarios.
“Estamos convencidos de que este esfuerzo para detener el tráfico ilícito de armas a México requiere de la participación de diversos actores y la creación de consensos en distintos frentes con el apoyo de la sociedad civil. Por esto nos hemos propuesto posicionar en la agenda pública binacional y global la necesidad de detener la violencia armada en nuestro país”, agregó.
Según el análisis de la Cancillería, los acuerdos de administraciones anteriores en materia de seguridad han sido fallidos, por lo que ahora se requiere un nuevo enfoque.
El secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, escribió que el problema es tan grave que será imposible que el Gobierno de México frene la introducción de armas ilegales al País. El 70% llega de EU y el 30 restante de Europa.
“En México, una vez que logran llegar como país de destino, el comercio se torna en corrupción, se evaden controles por parte de las autoridades correspondientes y, finalmente, las armas pasan de manera ilícita al mercado negro”, resumió.
Calculó que en México circulan alrededor de 15 millones de armas, de las cuales 85% ingresaron de manera ilícita.