››‘El Chueco’, terror impune
Noriel Portillo, El Chueco, es uno de los delincuentes más buscados en Chihuahua. En el gobierno de César Duarte Jáquez fue acusado del desplazamiento forzado de decenas de comunidades indígenas, de amenazas a gobernadores rarámuri, de masacres y de controlar el territorio imponiendo terror.
En el gobierno de Javier Corral fue declarado uno de los 10 delincuentes más buscados. Es parte del Cártel de Sinaloa, dentro del grupo Los Salazares, cuyo líder, Crispín Salazar, está prófugo por el asesinato de la periodista Miroslava Breach.
Funcionarios del gobierno de Corral reconocieron que en Cerocahui no hubo desarrollo forestal durante cuatro o cinco años por orden de El Chueco: exigió a los pobladores no talar árboles sin su consentimiento, porque de otra manera, les quemaría sus casas. Ninguna autoridad actuó.
Ahora, tras los crímenes contra los jesuitas, los gobiernos federal y estatal iniciaron investigaciones y prometieron una recompensa de 5 millones de pesos a quien dé información certera sobre El Chueco.
Y a petición de la Fiscalía General del estado de Chihuahua, el Instituto Nacional de Migración emitió el pasado miércoles 22 una alerta migratoria a nombre de José “N” para evitar que se sustraiga de la acción de la justicia, porque está imputado por varios delitos, incluidos los homicidios de los dos jesuitas y el guía de turismo.
Pero unas horas antes del triple homicidio en el templo de Cerocahui, El Chueco desapareció a dos hermanos: Paúl y Armando B.
Los hermanos jugaron un partido de beisbol días antes y le ganaron a un equipo patrocinado por El Chueco. El mismo lunes 20 de junio, antes de llevar al guía de turismo al templo, el delincuente fue a la casa de los dos hermanos y le disparó a uno. Luego se llevó
El templo de Cerocahui permanece cerrado para continuar con la investigación del asesinato de dos sacerdotes esta semana.
a los dos. Hasta ahora no aparecen.
En el lugar había una mujer y un menor de edad, quienes lograron escapar sin que El
Chueco los dañara. Al huir con los dos hermanos privados de la libertad, Noriel Portillo incendió la vivienda de esa familia.