La NBA está de luto por Popovich
Manu Ginóbili y LeBron James debieron contener las lágrimas. El expresidente Bill Clinton ofreció sus condolencias.
Así de grande es el aprecio que muchas personas, incluso ajenas al ámbito deportivo, sienten por Gregg Popovich, el entrenador de los Spurs de San Antonio, cuya esposa Erin falleció el miércoles tras una larga batalla contra un padecimiento respiratorio. Tenía 67 años.
Ginóbili, el astro argentino que solo ha tenido a Popovich como entrenador durante su trayectoria en la NBA, reaccionó consternado. “Todos estamos destrozados, dolidos”, dijo Ginóbili durante el entrenamiento matinal entre lágrimas. “Todos sabemos la clase de persona que es Pop. Muy pocos la clase de dama que era Erin”.
Otro veterano de los Spurs, el francés Tony Parker, mostró también su pesar.
“Esto pone todo lo demás en su perspectiva adecuada”, manifestó. “Hay cosas más importantes que el basquetbol”.
Los Popovich tenían dos hijos y dos nietos. Se conocieron en la Academia de la Fuerza Aérea en la década de 1970, cuando Gregg era asistente del entrenador de los Falcons. El padre de Erin, Jim Conboy, se desempeñaba como entrenador atlético de la Fuerza Aérea.
Gregg Popovich ha dirigido a los Spurs desde 1996 y los ha llevado a cinco títulos de la NBA.