EL ESQUEMA POLÍTICO DE LA CDMX ESTÁ ACABADO: MONREAL
El actual delegado de la Cuauhtémoc está convencido de poder trasladar toda su experiencia acumulada en política para aspirar a la Jefatura del Gobierno de la Ciudad de México en 2018 por Morena. Asimismo, asegura que CDMX está perdiendo el rumbo y hay qu
¿Qué tiene que aportar Ricardo Monreal a la CDMX?
—Primero, la experiencia acumulada a lo largo de 40 años al servicio público. Me defino como político y no me causa ningún conflicto porque la actividad política es una actividad digna, noble, a pesar de que en los últimos años se ha deteriorado por los actos de corrupción de servidores públicos. Sin embargo, en mi caso tengo la experiencia, capacidad y eficacia porque en 40 años de actividad política, jamás ninguna autoridad me ha señalado como responsable de abuso de autoridad, de un acto de corrupción o de una irregularidad administrativa. Ni siquiera una falta de tránsito he acumulado en 40 años de mi vida pública. Aunado a todo esto, estoy en el mejor momento de mi vida pública: más sereno, más cuidadoso, más conciliador, no ubicado en los extremos ni en la belicosidad ni en el conservadurismo político pleno. Ahora es el momento de aportarlo todo.
¿Todo esto también es lo que le diferencia de sus compañeros de partido que también aspiran a ser candidatos al 2018?
—Sí. Ellos han colaborado como trabajadores o empleados de un gobierno, pero yo he gobernado. En mi caso tengo la experiencia de gobernar un estado (Zacatecas) y sé cómo lograr y aplicar políticas públicas que combatan la inseguridad, la desigualdad o que generen empleo y se cree una armonía en la sociedad.
Después del 12 de agosto, ¿Morena irá unida a las elecciones del 2018?
—Sin duda. Hemos hecho un compromiso con la militancia de que vamos a respetar, todos, el resultado de la encuesta. Así generaremos confianza para poder ganar la elección constitucional y gobernar la ciudad en la que, estoy seguro, que va a ganar Morena. Es por eso que en este proceso interno caminamos muy unitarios, sin estridencias y así reforzamos el sentir de la ciudadanía por la alternancia. Ahora ya casi va 2 a 1, Morena trae en la última encuesta 34 puntos y el PRD 17, es decir, ya es muy difícil que alcancen a Morena. A finales de agosto o la primera semana de septiembre tendremos los resultados de la encuesta, después de conocer la terna el próximo 12 de agosto.
Siete de cada 10 capitalinos cree que tiene que haber alternancia en el GCDMX, ¿por qué?
—Primero, porque está agotado un esquema político que se inició hace 20 años. Creo que el PRD ha tenido momentos buenos. Hubo dirigentes con estilos personales que realizaron políticas públicas beneficiosas para la ciudadanía. Andrés Manuel López Obrador aplicó una política social que aún prevalece; Marcelo Ebrard, la continuó y le dedicó mucho tiempo a la seguridad pública pero este modelo político también trajo redes institucionales de corrupción, coporativismo, clientilismo, intereses creados por grupos protegidos y que, en este momento, este esquema se agotó. Por eso la gente ya no quiere que siga el mismo partido y se están inclinando por Morena. Es increíble que Morena, en tan sólo tres años, le esté dando la vuelta en el país y en la ciudad.
¿Cuál sería la base de su gobierno?
— Tengo un libro, Proyecto 2.5, que presenté hace dos meses y ahí ofrezco una visión metropolitana de la ciudad al 2050. Ahí planteo los ejes para generar políticas públicas competitivas para la entidad: seguridad pública, movilidad, desarrollo económico, desarrollo social, sustentabilidad y competitividad. La Ciudad de México tiene que alacanzar una competitividad similar a la de muchos países del mundo, se puede convertir en una de las urbes más visitadas pero también ser una de las mejor calificadas si actuamos con inteligencia. No me asusta la globalización, no me asusta la competencia y no me asusta tenerme que sentar con todos los sectores de la sociedad. Esta ciudad ya no va a admitir gobiernos sectarios y yo ofrezco autonomía, capacidad y eficacia, además de la honestidad. En mi caso, hay proyecto y hay candidato.
¿Sería usted y no otro (AMLO) quien tomará las decisiones?
—Por supuesto. Andrés será respetuoso como lo ha sido siempre. Yo lo digo por la experiencia; cuando él gober- naba el Distrito Federal, yo gobernaba Zacatecas. En ese tiempo tuvimos labores de coordinación y de relaciones entre estados pero nunca impuso, ni siquiera me sugirió, alguna forma para intervenir en el estado. Andrés Manuel va a respetar cuando sea gobernante, espero que él sea Presidente de la República.
¿Cómo afrontaría la inseguridad que aqueja a la CDMX?
—Desde 2013, según las estadísticas, ha crecido la percepción de inseguridad, pero también los índices de los delitos han crecido, los delitos de alto impacto y los delitos del fuero común que no son considerados graves. Sin embargo, tenemos forma de afrontarlos. Hay que crear una mezcla entre la investigación y la causa de los delitos. Es una pena que cerca del 38% de los investigados o procesados son jóvenes de entre 12 y 25 años. Es un tema muy grave que tenemos que atender de forma urgente desde el punto de vista social y educativo para que esto no genere un problema mucho mayor.
¿Cómo blindaría su gobierno contra la corrupción?
—Con voluntad política se puede acabar con las redes de corrupción instaladas en la CDMX. Yo lo he hecho en la delegación Cuauhtémoc. No hay un solo empresario, desarrollador o comerciante que pueda señalarme. No dudo que haya alguno que otro que persista con actos antijurídicos. Si el de arriba no roba, los de abajo tampoco roban o se van a cuidar bastante. Tienes que predicar con el ejemplo. La Ciudad de México tiene tres problemas graves que son la causa del aumento de la delincuencia: la desigualdad y la pobreza, el grado de corrupción y la desconfianza en la autoridad.
¿Y en el tema del medio ambiente?
—Es un tema alarmante en especial por la deforestación que sufre la ciudad. Estamos haciendo lo contrario de lo que se recomienda internacionalmente. Hay que cuidar el aire y el suelo para revertir el deterioro ambiental.
¿Apuesta por sancionar o resolver?
—Solucinar los problemas. Las políticas de sanción o de coercitividad ilimitada no ayudan. Hay que atender las causas y reestablecer el tejido social. Gobernar la ciudad no será una comodidad, porque hay muchos problemas. No será fácil, por eso se necesita carácter, capacidad y autonomía para tomar decisiones.