Cómo elegir frutas
Con el fin de optimizar nuestra economía es importante saber elegir bien las frutas al momento de comprarlas, decidir bien el tipo, cantidad, para cuándo planeamos su consumo y conocer las propiedades nutricionales que nos aportan.
Una gran ventaja es que hay ocho variedades diferentes, por lo que todo el año están disponibles, en el momento de adquirirlas, si las ocupas ya maduras, debes fijarte que la textura sea firme y hacer la prueba del pulgar, es decir si ceden a la leve presión con el dedo en el extremo del pedúnculo, esta fruta está lista para el consumo, si las requieres
para consumo posterior se pueden madurar al ponerlas con otras frutas o acelerar su proceso de maduración colocándolas dentro de una bolsa de papel, se conservan por más días dentro del refrigerador.
Los plátanos maduros tienen una piel amarilla y pecas color marrón claro, ideales para consumo a corto tiempo, los de color verde claro maduran en casa, ahora bien, si ya presentan manchas oscuras más grandes y queremos conservarlos por más tiempo, podemos refrigerarlos y congelar en una bolsa de plástico. Son ricos en potasio y vitaminas del complejo B.
Si su piel está vede está inmaduro o podemos dar pequeños golpes con nuestros nudillos, si se escucha un sonido profundo es que ya está maduro. Son ricos en betacarotenos, vitamina C y manganeso.
La cáscara suele ser la herramienta principal, si es uniforme, de color dorado y sin manchas oscuras significa está madura, también podemos darnos cuenta si las hojas son verdes, con la punta marchita y si se desprende fácilmente, han alcanzado el nivel óptimo, pero si notas un olor extraño es que ya están en descomposición. Está contiene potasio, ácido fólico, vitaminas A y C.