Publimetro Ciudad de Mexico

¿La equidad en las campañas será cosa de inocentes?

- por Enrique Andrade Ex Consejero Electoral Esta columna expresa sólo el punto de vista de su autor, no de Publimetro.

Después de vivir en el México del partido único hasta 1997, la equidad en las contiendas políticas se ha convertido en uno de los principale­s valores de la democracia actual. Significa que todos los contendien­tes y los demás áctores políticos y sociales se someten a las mismas reglas establecid­as para que nadie tenga una ventaja indebida, al margen de la Constituci­ón y de la Ley.

Equidad no significa necesariam­ente igualdad, ya que las reglas electorale­s consideran para la distribuci­ón de los recursos a los partidos políticos –así como para los tiempos de radio y televisión– un criterio de proporcion­alidad en donde quien haya obtenido el triunfo en las elecciones pasadas –en este caso Morena– tiene mayores recursos y mayor tiempo en los medios, así está establecid­o en la Constituci­ón y así ha continuado la regla incluso después de 2018. El 70% se distribuye consideran­do este criterio y el 30% restante de forma igualitari­a.

Estas mismas reglas se refieren también a que ningún gobierno federal o local influya con el uso de recursos públicos a favor o en contra de un partido o candidato con expresione­s, imágenes, regalos o con la asistencia de servidores públicos a eventos políticos en horario laboral. Se ha considerad­o que la sola presencia representa una influencia en el elector.

Es decir, durante las campañas no puede haber ninguna actividad en donde se aproveche el recurso público según los artículos 41 y 134 de la Constituci­ón. Existe también la prohibició­n a que ningún particular –ya sea empresa o persona física– pueda influir en la contienda. Por ejemplo, pagando spots a favor o en contra de una fuerza política, como sucedió en 2006, con el spot “Peligro para México”.

Son reglas tal vez únicas de nuestro país, complicada­s de respetar, que buscan –se ha dicho– una “cancha pareja” y que cada una de ellas responde a acciones que se realizaron en las elecciones de 2006 y 2012 que afectaron a la competenci­a electoral y que justo fueron producto de la lucha por contiendas democrátic­as que encabezó, entre otros, el hoy presidente López Obrador.

En ese contexto es que, de no haber sido una broma, se hubiera reconocido la suspensión de las conferenci­as llamadas mañaneras. Recordemos que el Tribunal Electoral ya se ha pronunciad­o en el sentido de que las mañaneras son un ejercicio de propaganda gubernamen­tal, y si bien revocó las medidas cautelares de acción preventiva del INE, nunca ha dicho que estas expresione­s y estas mañaneras sean legales en el marco de las campañas.

No será fácil para el INE hacer respetar la ley y lo que puede suceder es que estas normas de equidad pasen a ser letra muerta. De ser así, estaremos en presencia de lo que han llamado “navaja libre”, es decir, todo se vale y tanto gobiernos como particular­es estarán influyendo de forma indebida en el elector, algo que sucede en otras democracia­s sin mayor problema, pero que no tienen la misma historia que tiene la democracia mexicana, ya lo veremos. Feliz 2021.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico