Semáforo rojo recortará crecimiento nacional a 1.5%
El desempleo llegaría a 5.1%, la informalidad alcanzaría a 38 millones de personas y el ingreso familiar se contraería más, alertó el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM La vacuna del Covid-19 no es el antídoto contra la c
El semáforo rojo en la Ciudad de México y el Estado de México, decretado por el alto contagio de Covid-19, recortará el crecimiento nacional a un rango de entre 1% y 1.5% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021, alertó el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN) de la UNAM.
El coordinador de dicho centro, Ignacio Martínez Cortés, explicó que ambas entidades aportan 25% del PIB; por lo que el paro de actividades no esenciales, la caída del consumo, la pérdida de empleos y la quiebra de negocios en su territorio repercuten y ponen en riesgo la reactivación económica del país.
Indicó que, ante el aumento en los contagios y la ocupación hospitalaria –que llegó a 83% en el Valle de México– no hay condiciones para que el semáforo epidemiológico regrese a naranja, y ello implicaría que la productividad en la zona más importante del centro del país permanezca semiparalizada.
“El próximo 10 de enero, la Ciudad de México y el Estado de México cumplirán 20 días con semáforo rojo; y por las declaraciones de la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, se mantendrá así otros 15 o 20 días más.
“Los restauranteros, jugueteros, prestadores de servicios, comerciantes e industriales ya perdieron la época más importante de ventas e ingresos del año; y de continuar así, la economía nacional perderá dinamismo y recortará su crecimiento al mínimo”, alertó.
Al participar en le XIX Seminario Expectativas Económicas y Políticas 2021, Martínez Cortés indicó que el escenario base para el crecimiento de la economía mexicana –publicado por el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM– es de 2% del PIB para el cierre del año.
Pero, apuntó, “ante el semáforo rojo en la CDMX y el Edomex, los retrasos en la vacunación del Covid-19, la desconfianza de los empresarios e inversionistas y la falta políticas del gobierno para impulsar la llegada de capitales y el empleo, entre julio y agosto la economía comenzará un nuevo deterioro.
“Si esto no cambia, el PIB del país se reduciría hasta 1.5% o 1%, y esto traerá un aumento en la tasa de desempleo, 4.4% a 5.1%”, que llevaría a 2.8 millones a buscar trabajo sin conseguirlo; más 2.1 millones que ya no salen a buscar chamba, por miedo al contagio o cierre de actividades.
Por si fuera poco, advirtió el coordinador del LACEN, “la informalidad laboral aumentaría de 30 a 38 millones de personas, mientras que más de 44 millones de personas estarían en pobreza laboral: con ingresos insuficientes para comprar una canasta básica de alimentos”.