A una semana de la toma de posesión de Joe Biden, ¿cuáles son los principales temas a tratar en la relación entre México y EU?
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Claudia Anaya Senadora de la República por el PRI
Sin duda alguna, uno de los temas más sensibles es la migración. Nuestro gobiero debe impulsar que el trato hacia los migrantes sea con dignidad y pleno respeto a sus derechos humanos y dejen de ser vistos como criminales para evitar actitudes xenófobas en la frontera entre nuestros países, pues no debemos perder de vista que la expulsión del mayor número de personas fue precisamente bajo la administración del partido demócrata, el mismo partido de donde emana el presidente electo Joe Biden. Tenemos también pendiente la revisión de algunos temas del T-MEC, específicamente en el capítulo 23 en materia laboral, donde se contemplan multas a los corporativos y empresas que subcontraten a empleados en otros países (como aún sucede en nuestro país) para la manufacturación de productos y exportarlos nuevamente hacia Estados Unidos. Recordemos que el pasado mes de diciembre, la Junta Independiente de Expertos Laborales de México señaló en un reporte preliminar que aún no cumplíamos con todos los compromisos en materia laboral del T-MEC, resaltando entre ellos la transparencia en el conocimiento de las y los trabajadores en los contratos colectivos de trabajo y reportes financieros de su sindicato. Otro tema donde debemos prestar mucha atención es el energético. Sabemos que el presidente electo, Joe Biden, tiene una agenda verde donde el combate al cambio climático es una prioridad y, en ese sentido, aunque desde hace poco más de 5 años México firmó el Acuerdo de
París para revertir el efecto invernadero, las decisiones del presidente López Obrador privilegian una política energética del pasado.
Kenia López Senadora de la República por el PAN
Más allá de los errores de comunicación que ha tenido el gobierno federal –como la terrible imagen en donde el presidente López Obrador le aplaude de una forma vehemente a Donald Trump– y la tardía reacción para reconocer el triunfo del presidente electo, Joe Biden, es indispensable que se fortalezca la relación entre México y Estados Unidos. La llegada de Biden a la presidencia traerá grandes cambios como, por ejemplo, el tema ecológico y el uso de energías limpias, asuntos de suma importancia para la agenda de nuestro país vecino, muy diferentes a los que implementó Trump y a lo que López Obrador está acostumbrado. El tema de la seguridad también es un eje fundamental y seguramente será replanteado. Debe frenarse el flujo de armas provenientes de Estados Unidos a nuestro país, así como también urge se den soluciones para temas como el narcotráfico o la delincuencia organizada. Ambos podrían ser temas bilaterales que brinden certeza a los dos países. Ahora bien, si nos referimos a la pandemia por Covid-19, dentro de esta nueva forma de entendimiento social, habremos de tener una operación sanitaria sólida y benéfica para ambos países, con el único fin de salvaguardar la vida de millones de personas. El endurecimiento del gobierno de México en estos temas no ayudará a que fluya por buen camino la relación con la nueva administración estadounidense. Quienes hoy encabezan la toma de decisiones, deben reconocer la trascendencia e importancia de sus acciones y que éstas pueden repercutir positiva o negativamente. Estados Unidos, además de ser un país cercano geográficamente, es una nación con la que a lo largo de la historia hemos tenido una relación constante en materia comercial y política.
Mónica Fernández Senadora de la República por Morena
La relación entre Estados Unidos y México se ha caracterizado por una gran complejidad e intensidad, en ocasiones por temas de coyuntura, aunque siempre han estado presentes aspectos estructurales, lógicos entre dos naciones que, si bien muchas veces coinciden, en otras difieren por la perspectiva e intereses de dos culturas de países independientes. Sin embargo, esa agenda se ha ido resolviendo gracias a una constante voluntad de encontrar respuestas conjuntas a las cuestiones a través de la diplomacia y el estrechamiento amistoso. Como resultado de las asimetrías económicas entre México y Estados Unidos, la migración es un tema que ocupa uno de los lugares primordiales de nuestra agenda. En los últimos tiempos ha cobrado mayor relevancia, toda vez que se ha incrementado el paso por nuestro territorio de amplios grupos sociales que provienen principalmente de Centroamérica y ello exige que mediante el diálogo se encuentren soluciones para evitar el tránsito de esas personas, al tiempo de garantizar el respeto a sus derechos humanos. En ese sentido, el gobierno mexicano ha puesto en la mesa la necesidad de apoyar el desarrollo de la región, en especial de los centroamericanos, para favorecer su permanencia en sus países de origen. De igual forma, entre los asuntos que es necesario fortalecer la colaboración entre las dos naciones está el tráfico de armas que afecta a nuestra seguridad, así como los flujos financieros legales e irregulares que requieren la cooperación internacional.
Leonor Noyola Senadora de la República por el PVEM
El jueves de la semana pasada, el Congreso norteamericano ratificó la victoria, de las elecciones de noviembre de 2020, del demócrata Joe Biden como presidente de ese país, con un total de 306 votos electorales, con lo cual, el próximo 20 de enero tomará posesión. Lo anterior implicará para nuestro país una nueva etapa en las relaciones bilaterales, en diversos aspectos, con Estados Unidos. Al respecto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en relación con la conversación que mantuvo con Joe Biden, señaló que continuarán con una política de respeto mutuo a la soberanía de ambas naciones, así como de un trato de iguales y no de subordinación.
Considero que, el primer tema de importancia, como desde hace muchos años, es el relativo a la migración que, si bien es cierto, con algunos ex presidentes norteamericanos ha sido más complicado que con otros, también es verdad que es un tema que no deja de ser relevante para ambos países, dado el alto impacto que tiene en distintos aspectos (sobre todo el laboral y el económico), así como por la cantidad tan alta de mexicanos que viven en el país vecino del norte. Finalmente, quiero destacar que dos temas de política exterior que interesan al presidente electo de Estados Unidos de América son los relativos al cambio climático y derechos humanos; en relación con el primero, por ejemplo, nuestro país no está convencido de utilizar energías limpias en sus proyectos, y respecto del segundo, se cuestiona a los órganos constitucionales autónomos.