ENTREVISTA
¿Cuándo empezaste a jugar con los cubos Rubik?
— La primera vez que aprendí a resolver un cubo de Rubik fue a la edad de 14 años, en el primer año de secundaria, cuando un amigo me enseñó a hacerlo entre clase y clase. Desde entonces comencé a practicar unas horas al día y a competir poco después.
Entonces, ¿también eres bueno resolviendo el rompecabezas 3- D?
— Sí, durante mi carrera de speedcubing (principalmente 2009-2013) he recopilado más de 60 récords nacionales (en Italia), nueve récords europeos y tres récords mundiales. Mi último récord mundial fue en 2012, cuando pude resolver un cubo de Rubik en 9.43 segundos.
¿Qué te inspiró para crear estos retratos?
— En 2014 me mudé a Australia y comencé a trabajar. Tan pronto como recibí mi primer pago decidí comprar mis primeros 750 cubos. La razón por la que empecé a hacer retratos fue porque en lugar de pasar horas y horas tratando de resolver el cubo 0.1 segundos más rápido, podía pasar ese tiempo creando algo diferente.
¿Cómo se hacen?
— Todo comienza con la creación de un diseño, a partir de una imagen. Mi objetivo es tener la mejor definición posible usando una cantidad bastante pequeña de cubos. Cuando estoy satisfecho con el diseño, paso a recrearlo con los cubos, retorcidos uno por uno.
¿Cuánto tiempo tardas y cuántos cubos utilizas para poder completar uno de tus diseños?
— Desde el concepto hasta una pieza enmarcada profesionalmente lleva semanas de trabajo. En promedio utilizo 700 cubos, mientras más cubos necesite, mejor será la calidad.