ONG QUE ATIENDE A MILLONES DE NIÑOS AFGANOS SUFRE ATENTADO DEL EI
La organización informó que sus programas se suspenden por el clima de inseguridad; hay más de 25 heridos
Militantes del grupo Estado Islámico atacaron este miércoles la sede de una organización no gubernamental para la infancia en la provincia afgana de Nangarhar, lo que provocó un tiroteo con la policía que duró casi 10 horas y dejó al menos tres muertos y 25 heridos.
Ante esta situación, la organización Save the Children decidió suspender sus operaciones en Afganistán e informó que, ante la inseguridad, todos sus proyectos en el país se suspendían temporalmente.
Un comando armado irrumpió en la sede de Save the Children en Jalalabad disparando y lanzando explosivos, después de detonar un coche bomba a la entrada del complejo, desatando un enfrentamiento con la seguridad del lugar y tropas afganas locales que acudieron de inmediato.
La organización no gubernamental (ONG), que brinda educación básica, seguridad alimentaria y proyectos de salud a niñas y niños afganos en 16 de las 36 provincias del país, destacó que Afganistán es uno de los lugares más difíciles del mundo para ser un menor y para que los trabajadores humanitarios puedan operar.
Sin embargo, Save the Children aclaró que sigue comprometida con el apoyo que brinda a casi 1.4 millones de niños en Afganistán, por lo que confiaba en reanudar pronto sus operaciones, según un reporte de la agencia local de noticias TOLO.
“Seguimos comprometidos con la reanudación de nuestras operaciones y el trabajo de salvar vidas lo más pronto posible”, destacó la declaración de Save the Children, emitida poco después de que el grupo Estado Islámico (EI) se atribuyó la responsabilidad de la agresión.
En una declaración, difundida a través de su agencia noticiosa Amaq, el grupo extremista aseguró que el asalto armado contra la ONG fue obra de sus yihadistas (combatientes islámicos) y que había matado a más de 100 personas.
El Ejército dijo que el ataque terminó aproximadamente a las 19:00 horas locales (14:30 GMT), después de casi 10 horas de intensos combates, con la muerte de todos los yihadistas y el rescate de unas 50 personas, aunque se desconoce el paradero de otras 20, quienes se cree escaparon en medio del tiroteo.
Funcionarios de la provincia de Nangarhar confirmaron que tres personas murieron, entre ellas dos guardias de seguridad de la oficina de Save the Children, y otras 25 resultaron heridas, cuatro de ellas guardias de seguridad.
“En respuesta a esto, todos nuestros programas en todo Afganistán se han suspendido temporalmente” Comunicado de Save the Children