Confesiones salpican a Cristina Fernández
La resolución judicial en la que la ex presidenta argentina Cristina Fernández fue procesada por liderar una asociación ilícita en la que funcionarios de su gobierno recaudaban sobornos de empresarios a cambio de premiarlos con obras públicas, contiene impactantes declaraciones de imputados que confesaron las irregularidades.
Éstas son algunas de las declaraciones recogidas por el juez Claudio Bonadío en su escrito de 500 hojas en el cual también involucró a Néstor Kirchner (2003-2007), fallecido marido y antecesor de Fernández, en las presuntas maniobras de corrupción.
El empresario Manuel Santos Uribelarrea narró que accedió a entregar sobornos debido a la fuerte presión que provenía del Poder Ejecutivo.
“La sola emisión del pedido por parte de quien ocupaba un lugar importante dentro del organigrama de poder del gobierno anterior fue suficiente para tener fundadas sospechas de que si no entregaba el dinero, podía tener inconvenientes preocupantes como empresario”, dijo.
El empresario Juan Chediack relató que el ministro de Planificación Julio De Vido lo amenazó.
Los lugares de entrega del dinero eran dos: el Ministerio de Planificación donde “me decía que deje los paquetes de dinero en el baño” o en la propia casa del funcionario, “en su living, al lado de unos bonsáis”.
Claudio Uberti, titular del Órgano de Control de Concesiones Viales durante el mandato de Kirchner, dijo que en una ocasión en 2005 el entonces presidente se enojó cuando le entregó pesos provenientes de la recaudación en lugar de dólares.