Poner candado al Topo Chico le cuesta al Bronco una serie de amenazas
En la clausura del Topo Chico, el gobernador dijo que no puede ni acudir al cine porque pondría en riesgo a sus acompañantes
El gobernador Jaime Rodríguez realizó ayer la clausura oficial del penal del Topo Chico, por lo que más de un centenar de reos fueron trasladados al reclusorio de Apodaca. El mandatario señaló que esta decisión detonó una serie de amenazas del narco, por lo que ha restringido sus salidas a espacios públicos al lado de su familia.
La decisión de cerrar el penal del Topo Chico le ha costado al gobernador del estado, Jaime Rodríguez Calderón, amenazas del crimen organizado al punto que, confió, ya no puede ni acudir al cine porque pondría en riesgo a las personas que lo acompañan.
El mandatario estatal encabezó la ceremonia de Cierre de Operaciones del Topo Chico, que se celebró la mañana de este lunes ante autoridades, invitados especiales y los últimos 150 reos que fueron traslados hacia el penal de Apodaca.
En un discurso de más de 30 minutos, el Bronco destacó que el tema de la violencia y maldad es muy complicado, por lo que pidió generar buena vibra para que salgan bien las cosas.
“Yo no puedo ir al cine porque a la mejor alguien está enojado conmigo; ustedes sí pueden ir al cine, yo no puedo ir a muchos lugares porque arriesgo a los que van conmigo”, manifestó.
Dijo que el problema es que tomó la decisión del cierre del centro penitenciario.
“Y sé que a muchos les va a molestar y sé que a muchos les está molestando. Recibo muchos mensajes, muchos no agradables, que no los digo para no preocupar a nadie, pero todos los días, cada rato, porque tomé esta decisión”, expuso.
El mandatario estatal afirmó que el crimen organizado se molestó porque afectó sus intereses.
“Le quitamos a la delincuencia organizada una gran cantidad de ingresos; millones de pesos y eso no es sencillo”, sostuvo.
Remarcó que sobre el tema del control penitenciario otras administraciones evadieron la responsabilidad.
“No es sencillo, por eso los gobernantes decían: que lo resuelva el que sigue, que lo resuelva el que sigue, pero bueno, me tocó y tomé la decisión, lo hice pensando en que aquí seguiré viviendo, que aquí mis hijos van a crecer”, sostuvo el mandatario.
Eduardo Guerrero Durán, asesor de seguridad penitenciaria del gobierno estatal desde noviembre del 2018, recalcó que el penal del Topo Chico se cerró por inoperable, no por ingobernable.
Sin embargo, destacó que este 30 de septiembre es un día histórico para todo el sistema penitenciario mexicano porque representa el triunfo del orden sobre la anarquía y de la paz sobre la violencia.
“El penal del Topo Chico encierra un sus muros una gran cantidad de historias, muchas de ellas que se convirtieron en episodios muy dolorosos y trágicos”, recordó.
Resaltó la voluntad política del gobernador de cerrar el penal. “Estos son temas muy difíciles para los gobernadores, son temas que no dejan votos, son temas que llevan riesgos para usted y su familia”, estableció Guerrero Durán.
En la ceremonia un reo también tomó la palabra y se trasmitieron dos videos con la historia del penal.
Finalmente, de forma simbólica, el gobernador colocó un candado en uno de los accesos del centro penitenciario para dar por terminados 76 años de la historia de un penal marcado por la violencia.
“Le quitamos a la delincuencia organizada una gran cantidad de ingresos; millones de pesos y eso no es sencillo” Jaime Rodríguez, gobernador de NL