UNA VIDA DEDICADA AL ENTRETENIMIENTO
Equilibrar la mente y cuerpo es el secreto de Horacio Villalobos para hacer radio, televisión y teatro.
Por las mañanas se le escucha a través de la radio y por las noches se le ve en televisión. Los fines de semana no los usa para descansar, sino para aparecer como juez de La academia o como deidad en la obra Un acto de Dios. Así es la vida de Horacio Villalobos quien, seguro, ha cambiado su diversión por una vida dedicada a la industria del entretenimiento, y a la conducción de Dispara, Margot, dispara, Farándula 40 y su colaboración en La de Ocho, en la barra de opinión de TV Azteca. “La vida social ha quedado muy rezagada porque implica un tiempo que no tengo. No es un sacrificio, aunque a veces sí se convierta en uno. Cuando no puedes ir al cumpleaños o la boda, o no puedes tomar vacaciones, sí que lo es, pero la verdad es que me siento muy contento porque hago lo que quiero y la meta es seguir trabajando”, dice en entrevista. No es cosa fácil. Además de sus programas de cabecera, figura como juez del reality La academia, y a partir del 19 de octubre volverá a protagonizar la obra en la que “Dios” entrega los nuevos 10 mandamientos para hacer una reflexión sobre la sociedad actual. Pero esto implica mucho trabajo que se resume en balancear el cuerpo y la mente. “Creo que todo el mundo tiene varios talentos, no sólo uno, y lo que hago es ejercitarlos. Para que yo pueda tener la mente clara, tomo clases de canto, hago ejercicio y me meto con mucho rigor a la sana alimentación”. Con la mente clara y las metas fijas, Horacio llegará al teatro Royal Pedregal para presentarse las tardes de los viernes, sábados y domingos.