BIENVENIDO SEAS, PETIT LOLA
Un toque de nostalgia, desayunos y comida que amamos: Le Petit Lola es el producto final de los platillos rescatados de Le Petit Cluny, La Trattoria della Casa Nuova y L’encanto De Lola.
Le Petit Lola es el producto final de los platillos rescatados de Le Petit Cluny, La Trattoria della Casa Nuova y L’encanto De Lola. ¡No dejes de visitarlos!
Es domingo por la mañana y sabes que lo mejor de tu día será llegar a Le Petit Cluny, pedir una cazuela de huevos estrellados al horno en salsa de jitomate italiano, jamón y queso gouda… ¡Ah! Ni el café ni el pan dulce pueden faltar. Ese es el recuerdo más feliz de muchos en la década de los 80 y 90. Por supuesto, los responsables de esta especie de gloria en la tierra eran Serge Roterman y Adriana Casanova, la feliz pareja que SIEMPRE veías en el lugar. Los años pasaron y Le Petit Cluny se convirtió en la Trattoria della Casa Nuova, un paraíso que te recibía con el olor de su pan recién horneado, su cocina italiana casera y sus deliciosos desayunos. Cualquiera que los visitó coincide: el mejor pan y la mejor pizza Napolitana los encontrabas ahí. Imaginen la sorpresa cuando se anunció (en tiempos de pandemia) que la Trattoria cerraba sus puertas… decir que muchos estaban completamente devastados es poco.
La tristeza no duró mucho tiempo, pues Candice, hija de los creadores de Le Petit Cluny y la Trattoria Casa Nuova, decidió rescatar lo más valioso de estos dos conceptos y llevarlos a su restaurante, L’encanto De Lola, un lugar de tortas atípicas y malteadas espectaculares, que ahora se ha convertido en Le Petit Lola. La cazuela de huevos más aplaudida de Le Petit Cluny, los crujientes y suaves waffles con crema batida, así como la lasaña estrella y el rol de canela de la Trattoria, son algunos de los platillos “rescatados” y que ahora hacen mancuerna con las tortas y malteadas de Candice. La lealtad hacia ellos continuará. Después de todo, la cordialidad en el servicio y el afán de mejorar siempre su calidad se nota en cada una de las cosas que hacen. ¡Muy bienvenido seas, Le Petit Lola! Recién llegaste y ya te queremos.