Opción Tata
Ante la 'Tucanovela' desatada por Tigres y la Federación Mexicana de Futbol, ahora los dardos apuntan a Gerardo Martino, el experimentado técnico argentino, como posible entrenador nacional.
El Tata lleva hoy una vida tranquila en Atlanta y la lleva como la tenía planeada tras dirigir a la selección paraguaya en un Mundial, de conseguir tres subcampeonatos de Copa América, dos de ellos al frente de Argentina, y de vivir en pleno la aventura mediática y de exigencia absoluta que representa la banca del Barcelona.
Su perfil tranquilo y de amplio diálogo en sus conferencias de prensa contrastan con sus maneras efusivas cuando la pelota rueda y él se encuentra en la zona técnica.
Cansado de la presión de entrenar a la Albiceleste y al cuadro culé de Messi, se alejó de la polémica para colonizar tierras vírgenes como las de Georgia en los Estados Unidos.
Hoy, Atlanta es el mejor equipo de la MLS, juega a uno o dos toques con gran despliegue y marca dos goles en promedio por partido.
La vida le va bien y nadie lo ataca; sin embargo, puede que exista todavía el bicho de querer volver con una selección que le dé la oportunidad de dirigir otro Mundial.
Martino sabe del futbol mexicano lo que cualquier entrenador de primera línea en la MLS conoce sobre la Liga MX. Es un hombre plenamente identificado con la idiosincrasia de Latinoamérica y en muy poco tiempo entendería los flecos que tiene el jugador mexicano. Que no le fue bien en Barcelona es un hecho, porque quedar segundo en todo es un fracaso cuando uno se viste de blaugrana, pero que es un hombre con un currículum pocas veces visto por estos lares también es una realidad absoluta.
Si Martino llega a México se saldrá de su amplia zona de confort ganada en Estados Unidos y tendrá la difícil tarea de refundar una Selección que vive en la incertidumbre y que necesita renovar a la gran mayoría de sus protagonistas, herramientas básicas para que su chamba o la de cualquier otro DT funcione.