TORO SALVAJE
Del infierno a la gloria. Luego de un cierre de 2022 e inicio de este año turbulentos, la conexión entre Max Verstappen y Sergio Pérez se encendió de nuevo y con amplio control en la calificación del Gran Premio de Bahrein, el Bicampeón del Mundo y el mexicano hicieron el 1-2 para atacar esta mañana y buscar con furia el primer triunfo de la temporada para Red Bull.
El trabajo no fue sencillo, pues en la Q1 y Q2, la escudería austriaca vio cómo los Ferrari y Mercedes pasaban por delante. Sin embargo, ésta es la era roja en la Fórmula Uno y con un cierre perfecto, Mad Max se hizo de la pole position, mientras que Checo se quedó sólo a 0.138seg.
"Cuando pierdes la pole por una décima de segundo siempre piensas que podrías haber dado un poco más, eso es sólo una zona de frenado o algo así. Estuvo muy cerca", comentó el mexicano en Sakhir.
La superioridad del RB19 ya va asomándose pese a que la temporada está a punto de iniciar esta mañana. Pero el desarrollo ha sido largo, pues para llegar al punto en que ambos pilotos son favoritos se trabajó desde el año pasado, tanto en los talleres como en simuladores.
"Hicimos algunos compromisos en la calificación para la carrera y espero que valgan la pena para que podamos tener un monoplaza muy fuerte. Me siento más cómodo", añadió Pérez.
En 2022, Max y Checo lograron cinco veces el 1-2. Iniciar ahora con esa combinación sería perfecto para evitar los sustos, como el que dio Ferrari la temporada anterior.
Aun así, el tapatío no se confía y sabe que tanto la Scuderia como los Flechas, con Lewis Hamilton y George Russell en buen momento, y hasta Fernando Alonso serán peligrosos desde que la luz verde brille en Bahrein.
"No había visto tipo de ritmo en los SF23, así que creo que se han estado escondiendo un poco. Si Charles (Leclerc) hubiera hecho su último giro habría tenido una oportunidad para la pole", concluyó el #11 de RBR.
Ferrari estará en la pelea por la carrera, junto con Aston Martin y Mercedes" Sergio Pérez PILOTO DE RED BULL