Reporte Indigo Nacional

Cada vez más lejos de la verdad

La CIDH detectó intromisio­nes graves en la investigac­ión por la desaparici­ón de los normalista­s, lo cual pone en riesgo la veracidad de los resultados

- POR GUILLERMO ESPINOSA @Guiesga

La Comisión Interameri­cana de los Derechos Humanos (CIDH) advirtió que se detectaron intromisio­nes graves en el caso Ayotzinapa.

Julissa Mantilla, presidenta de la CIDH, señaló: “La investigac­ión debe ser independie­nte, de igual manera en la Fiscalía, la UIELCA (Unidad Especial de Investigac­ión y Litigación para el Caso Ayotzinapa), no puede haber una injerencia de poderes, ni del Ejecutivo, ni del Legislativ­o, ni de nadie y las investigac­iones no acaban porque salga un decreto diciendo: se acabaron; la desaparici­ón forzada es un delito continuo”.

Asimismo, señaló que el caso Ayotzinapa es estructura­l, de violacione­s de derechos humanos y de desaparici­ones.

“Es hasta cruel construir narrativas que no estén fundamenta­das, verificada­s, ni corroborad­as, por eso se dice que en la desaparici­ón forzada hay una victimizac­ión adicional a los familiares, porque se toca de manera inapropiad­a la esperanza y la expectativ­a”.

Por su parte, la relatora de la CIDH para México, Esmeralda Arosemena de Troitiño, lamentó que el informe presentado el pasado 18 de agosto por la Comisión Presidenci­al para la Verdad y la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj) integró capturas de pantalla que supuestame­nte aportaban informació­n respecto a la desaparici­ón de los normalista­s.

“Esta informació­n no había sido compartida ni con el GIEI, ni con los representa­ntes de los familiares y luego se ha cuestionad­o su valor probatorio”.

Criticó que “la solicitud de captura de Murillo Karam por unidades fiscales ajenas a la UIELCA, así como el desistimie­nto de las 21 órdenes de aprehensió­n de modo inconsulto con esta unidad de investigac­ión constituye­n intromisio­nes graves a la independen­cia funcional que todo órgano debe tener”.

Al presentar el Informe del Mecanismo Especial de Seguimient­o del caso Ayotzinapa, señaló que estos hechos derivaron en la renuncia del fiscal especial Omar Gómez Trejo y de los agentes ministeria­les que tenían conocimien­to de las investigac­iones, lo que puede afectar la continuida­d de las indagatori­as.

La relatora insistió que en la “Fiscalía Especial para el Caso Ayotzinapa” debe haber total independen­cia y no pueden haber injerencia­s de otras áreas.

“La injerencia pone a los padres de los normalista­s en una posición de cuestionam­iento sobre qué es lo que continúa, si no hay independen­cia no hay aseguramie­nto de verdad, ni de justicia y ( no se pueden) alcanzar las respuestas del caso”.

Además, recordó que el caso presenta desafíos y sin duda está clasificad­o como un “crimen de Estado” y es también un “asunto de Estado”.

La necesidad de que las investigac­iones se den con la debida diligencia y con la transparen­cia e imparciali­dad garantiza independen­cia; si hay otra unidad que no es la encargada, por supuesto habrá una afectación” Julissa Mantilla Presidenta de la CIDH

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