Juventud en el Zócalo:
Plancha llena. Durante un fin de semana, más de cien mil adolescentes de todas las edades (algunos acompañados por cónyuge y niños), se dieron cita para corear a los artistas del momento y a otros grupos más, ídolos de siempre. Uno a uno, desfilaron por el Zócalo capitalino: Carla Morrison, María Daniela, Amandititita, Fobia, La Lupita y El Gran Silencio durante la Semana de las Juventudes, además de otros 25 artistas del sonido que deleitaron a chicos y grandes con un espíritu que nunca envejece: el de la música.
Tardes de color. Un festival de estas características sólo pudo realizarse con la supervisión de empresas serias, y fue Productora de Espectáculos y Eventos Especiales (Prees) la compañía ganadora de la licitación a la que convocó el Instituto de la Juventud, para afianzar los puntos finos de cada reunión.
“Llevamos semanas planeando”
Joven de corazón. Durante la Semana de las Juventudes, el ingeniero Luis René Cárdenas fungió como production manager, al frente de un escuadrón de expertos: “Tuvimos veinte personas trabajando en el backstage, la barricada, el escenario y los motores. Todos hicieron una labor maravillosa”, indicó Luis René; “como jefe de audio vino Gustavo Bautista, quien estuvo a cargo de ocho ingenieros experimentados, y en iluminación vino un crew de ocho técnicos, comandado por Carlos Rosanoff, director de Prees”. Propuesta ingeniosa. “Hicimos muy eficiente el proceso”. Luis René resaltó: “en el escenario pusimos una sobre tarima circular de once metros de diámetro con un doble propósito, para que mientras un grupo tocara al frente, el círculo giratorio permitiera que la siguiente banda hiciera su set in atrás”. ¿Cómo funciona? “Es un sistema mecánico con un motor eléctrico y un elevador, que puede girar hacia la derecha o la izquierda”; Luis René matiza: “el escenario no pesa porque en el diámetro tiene una estructura con patas y ruedas sobre el que se distribuye su peso y el motor le hace girar desde el centro”.
Video para todos
“Usamos sesenta metros cuadrados de pantalla en un diseño con pantallas laterales y circuito cerrado, en unos listones, para que llevara un músico en cada uno”, revela el production manager; “utilizamos un switcher matricial que permitió enviar la señal que deseábamos a cualquiera de las pantallas.