Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, celebración de oro
En 2017 se conmemora el centenario del nacimiento de Amalia Hernández, una de las bailarinas y coreógrafas más importantes en la historia de la danza de México, y como parte de los festejos, el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, de manteles largos, presentó un espectáculo en el que se desatacan vestuarios y excepcionales coreografías, que hacen gala del arte que representa este ballet en el mundo entero.
Grandes festejos
La presentación de El Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández dura más de dos horas, y como hemos señalado en otras ocasiones, la calidad de los diversos espectáculos que se presentan en nuestro país no sólo recae en lo que el público puede ver sobre el escenario, sino también en la labor del staff y equipo de producción tras bambalinas. Ante ello, la tarea de conversar con ingenieros de audio, iluminación y encargados de la producción fue muy gustosa, compartiendo los detalles y aspectos significativos para que la presentación de esta importante compañía de ballet tuviera un resultado exitoso. “El Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández sale continuamente del Palacio de Bellas Artes para realizar diversas presentaciones dentro y fuera del país. Buscamos que todas las personas conozcan de cerca la oferta cultural de este icónico espectáculo. Estamos muy contentos con la respuesta del público. Nos presentamos en diversos escenarios como parte del festejo por el centenario del nacimiento de Amalia Hernández y uno de ellos fue el Auditorio Metropolitano Tecámac”, explica Laura Becerril, coordinadora de giras del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández; “a ella se le recuerda por su lucidez, talento, tenacidad y visión, aspectos que la convirtieron en un icono cultural dentro y fuera de México. En 1952 fundó el Ballet Folklórico de México”.
Como parte de la logística y previo a la presentación, se llevaron a cabo diversas reuniones entre el personal del ballet y la gente del Auditorio Metropolitano Tecámac. El objetivo consistió en que la agrupación dancística, como siempre que sale del Palacio de Bellas Artes, se presente al interior del país con su calidad y prestigio para que el público conozca y disfrute lo que lo ha caracterizado durante 65 años en México y en el mundo.
“La planeación esta vez tomó tres visitas técnicas, una junta general y una a distancia, lo anterior para detallar los últimos puntos. Conseguimos mucha movilidad, tuvimos un montaje limpio y rápido; buscamos que se ocuparan menos ‘ fierros’ en cuanto a iluminación, escenografía y audio; quisimos que el escenario y todo en general estuviera enfocado con un sentido teatral”.
“Buscamos que se dieran las facilidades para la presentación y éstas se cumplieron”, continúa Laura; “el personal y el staff del Auditorio Metropolitano Tecámac nos apoyaron en todo momento; fue una excelente sinergia. Trabajamos mucho en la pre producción para que todo saliera como buscábamos, lo que ayudó a que no tuviéramos ninguna complicación y que todos pudieran disfrutar de este gran espectáculo”.
Cabe señalar que la presentación del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández en el Auditorio Metropolitano Tecámac estuvo acompañada de la Orquesta Sinfónica Juvenil de la Universidad Autónoma del Estado de México (OSJUAEM), la cual fue fundada en el mes de septiembre de 2014 y está conformada por 65 jóvenes estudiantes de 14 a 25 años. Fue un proyecto sociocultural que buscó acercar a los jóvenes universitarios a la orquesta, como público o miembros activos.
Otro aspecto a destacar fue la improvisación de un fondo de orquesta debajo del escenario. Se buscó que conviviera la orquesta y el ballet en el mismo espacio y que el público pudiera disfrutar de este formato y se consiguió sin complicación. En ningún momento estuvo comprometida y tampoco se afectó el ángulo visual de los asistentes. El público, desde cualquier lugar, siempre mantuvo una plena atención de lo que se escuchaba y veía.
Iluminación, creadora de atmósferas y espacios
En lo que respecta al trabajo de iluminación, estuvo a cargo de Carlos Arellano, ingeniero de iluminación del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, quien señaló que se montó equipo robótico como luminarias wash, PAR LED, molefays y seguidores, entre otros más. Explicó que se eligieron estos equipos, ya que al ser un espectáculo al aire libre y en la tarde-noche todavía había luz natural cuando inició el show.
“Estas luces dan mayor brillantez al vestuario y atuendos de los bailarines, marca más los números especiales, ayuda a crear y definir aún más los momentos íntimos, destacando los detalles. Permite construir atmósferas, consolidando así la presencia de los bailarines sobre el escenario y a su vez que el público se adentre y conecte con el espectáculo. Buscamos manejar un concepto integral en todas las presentaciones; es decir, lo mismo que se realiza en el Palacio de Bellas Artes, aunque hay cuestiones como el tamaño del lugar, si está al aire libre o cerrado, lo que nos dicta la manera en que actuamos, sin embargo, aquí en México o en el extranjero nos adaptamos a la características del lugar”, dijo Carlos Arellano. “El concepto de iluminación que hemos definido para las presentaciones del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, en prácticamente todas sus presentaciones, es dar mayor volumen a los bailarines y destacar la brillantez del vestuario, que es muy colorido, ya que representa todas las regiones de México, las cuales se conforman de colores brillantes y con tonos altos. Para mí, la iluminación es un sentimiento, da sentido a un momento, destaca y complementa el arte visual de un espectáculo”, finaliza Carlos Arellano.
En esta ocasión, se utilizaron, mayormente, tonos congo (mezcla de rojo con azul), combinado ámbar, y predominaron los tonos magenta, morados, violetas, cyan y azules.
Audio, más que potencia
El sonido es otro aspecto que debe cuidarse, si lo que se busca es que no sólo los asistentes disfruten del espectáculo sino que el músico, agrupación o artista en cuestión exploten todo su potencial y talento. En esta ocasión, el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, si bien es un show en su mayoría visual, el audio es un ámbito que no pasa desapercibido. Para conocer más acerca del tratamiento que se realizó, en esta área platicamos con Pablo Flores, jefe de audio del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández. “Tuvimos dos juntas preliminares previo al montaje, revisamos el espacio del Auditorio Metropolitano Tecámac, no lo conocíamos, empezamos a gestionar para adaptar el lugar a una orquesta sinfónica y resolvimos la cuestión de tener un escenario frente a un escenario. Creamos un foso de orquesta, montada debajo del escenario superior, que es donde se presentaría el ballet. Buscamos no tener problemas con el PA, ya que éste se ubicó a la altura de donde estarían los bailarines. Para ello eliminamos dos cajas de down fill. En esta ocasión ocupamos un sistema Adamson. Se hizo un arreglo para que con menos cajas se cubrieran más áreas en su totalidad. También se optó por un delay, el cual estaba a cincuenta metros de distancia del PA principal”, expresa Pablo.
“La consola Yamaha CL5 se ocupó para la orquesta y la Digico SD9 para el ballet. Ambos equipos son una garantía por su funcionalidad, fácil operación y potencia. Se ocuparon doce cajas por lado y un down fill de ocho cajas Adamson, así como cuatro subwoofers de la marca; lo anterior ya que debido al tipo de espectáculo, esa era la potencia requerida”. “En cuanto a las características acústicas del lugar, no hubo ninguna complicación. El Auditorio Metropolitano Tecámac es amplio y adecuado, y al usar el delay no se necesitó de mayor presión sonora. Buscamos que el sonido fuera uniforme, no sólo para el área del público, sino en el mismo escenario. El lugar había recibido otro tipo de espectáculos con otro concepto, pero el de nosotros es distinto: no requeríamos tanta potencia, sino una mayor y mejor definición en todas las áreas. Eso lo conseguimos con los equipos Adamson”, concluye Pablo Flores.
El lugar fue inaugurado en marzo pasado y en él se han presentado agrupaciones como Bronco, Banda MS y cantantes como Julión Álvarez y su Norteño Banda, Pedro Fernández, y en esta ocasión y por primera vez, el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández. Está ubicado en los límites de los municipios Tecámac y Ecatepec, cuenta con una capacidad de trece mil asistentes, tiene diez cubículos para palcos, ocho accesos, dos entradas para personas con capacidades diferentes, dos áreas de terraza y 18 módulos de sanitarios, así como un estacionamiento con capacidad para mil 400 autos y 36 autobuses.
En la presentación del Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, los asistentes pudieron disfrutar de coreografías como Los hijos del sol, Los Quetzales, La Danza del Venado, Los antiguos soles de Michoacán, El Cupidito y La jarana yucateca, entre otros, durante más de horas que duró el espectáculo. Desde su fundación, el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández ha visitado más de 300 ciudades en 60 países entre los cuales están: Reino Unido, España, Francia, Alemania, Rusia, Turquía, Egipto, Israel, China, Corea, Japón, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Estados Unidos, Cuba, Guatemala, Nicaragua, Venezuela, Brasil, Perú, Chile y Argentina, recibiendo el amplio reconocimiento del público. Asimismo, teatros a nivel internacional como la Ópera de Paris, el Kennedy Center, el Kremlin, La Ópera de Tokio, La Ópera de Sidney, el Carnegie Hall en Nueva York y La Ópera de Muscat han sido testigos de la calidad de primer nivel de este icónico y tradicional ballet mexicano.
Entre los reconocimientos que ha recibido están el Premio Nacional de las Artes, La legión de Honor de Paris, Premio Tiffany otorgado por la crítica de Nueva York y Premio de las Naciones, entre otros.
Como parte de la conmemoración del centenario del nacimiento de Amalia Hernández, El Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández realiza una gira nacional por más de treinta ciudades de veinte estados de la República Mexicana, pero también se presentará en Guatemala, Nicaragua, El Salvador, Costa Rica y Panamá. Justo en este mes, se presentará en el Auditorio Nacional y también viajará a Londres, mientras que en octubre se dirigirá a varios países de Sudamérica y terminarán sus actividades con un homenaje en Nueva York.
Presenciar un espectáculo como el Ballet Folklórico de México de Amalia Hernández, es una de las experiencias que nadie debe perderse; no sólo es conocer parte de la cultura mexicana de los últimos sesenta años, sino que es un evento integral en el que artes visuales y sonoras se conjugan. En esta ocasión, el Auditorio Metropolitano Tecámac no sólo fue sede de un evento cultural, el cual ha puesto en alto el nombre de nuestro país a nivel mundial, sino que dio muestra de que al interior de la republica hay espacios idóneos que pueden recibir producciones y presentaciones de talla internacional.