Todo el mundo para Ebrard solito
Los diplomáticos se reintegraron a sus trabajos con una certidumbre:
-Marcelo Ebrard tiene plena autonomía.
En otros términos:
Durante la reunión anual de embajadores y cónsules, esta vez diferente y más incierta, el canciller se mostró muy solvente tanto en sus discursos oficiales como en sus encuentros privados.
Antes, hasta Enrique Peña y pese la ascendencia de Luis Videgaray, el presidente de la república les daba un mensaje con saludos, agradecimientos y lineamientos generales.
Esta vez Andrés Manuel López Obrador fue más cauto inclusive para pedirles su conversión en promotores de inversión empresarios y de gobiernos extranjeros.
Instrucción fundamentalísima e inalienable sobre todo porque está decretada la desaparición de organismos importantes como el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) y Pro México.
Se les consideró inútiles y un nido de corrupción, por lo cual no fueron posibles ni mayores análisis ni una modificación en su presupuesto ni en sus funciones. Ya vendrán las facturas del tiempo.
UN VIAJERO MUY SELECTIVO
Hay razones para pensar en este cambio de política exterior.
La primera:
Andrés Manuel López Obrador no es afecto a viajar en aviones por temores muy personales y me- nos a realizar vuelos largos, como suponen los encuentros extranjeros. Ya verá cómo resuelve mucho invitaciones pendientes de atención, entre ellas la del presidente ruso Vladimir Putin y de su aliado venezolano Nicolás Maduro.
Del segundo, no hay un buen síntoma: no ha designado embajador en Caracas y a su nueva investidura -¿cuántas más intentará?- mandó al agregado comercial de una delegación acéfala. De momento los augurios de embajadores y cónsules es la presencia plenipotenciaria de Marcelo Ebrard a los actos oficiales de otras naciones. Se le verá solo con presidentes, primeros ministros y cancilleres -por supuesto acompañado de representantes diplomáticos en esos lugares-, inclusive en negociaciones y suscripciones de acuerdos de colaboración y comerciales.
Por ahora, el tabasqueño intentará evitar viajes al extranjero y sobre todo largos.
Luego, llegada la necesidad, López Obrador analizará cada caso y decidirá de manera selectiva a cuáles eventos multilaterales asistirá. Captaron bien la estrategia los embajadores.
El canciller Marcelo Ebrard se mostró muy solvente en sus discursos