OTRO TRABAJO IR AL TRABAJO
Karen pasa más de dos horas al día en el transporte público, para poder llegar a cumplir su jornada laboral diaria.
Es increíble, como pasamos hasta tres horas y media al día, en el transporte”.
Llegar al trabajo puede ser una tarea agotadora, tal como lo experimenta Karen, quien debe tomar el transporte público desde su hogar en el fraccionamiento Villa del Cielo hasta su trabajo como auxiliar contable en la avenida Gregorio Méndez Magaña, de lunes a sábado.
A las 11:00 en punto, Karen aborda la combi que la llevará a su destino, acompañada por sus vecinos y sus auriculares. Mientras escucha música para pasar el tiempo, sabe que debe recorrer todos los fraccionamientos cercanos antes de llegar a su trabajo.
“Siento que ando volando ya carnal, y aquí nunca nos vamos a quejar, para que vamos a voltear para atrás”, se escuchaba desde la bocina del chofer, que andaba alucinado, asegura la joven.
Después de media hora de viaje, Karen ya está cansada y sabe que el tráfico se pondrá más pesado. Las noticias y chismes de sus vecinos, y la música de corridos del chofer llenan el ambiente. A pesar de todo, Karen aprovecha para adelantar algo de trabajo mientras viaja.
ESTROPEADA DEL VIAJE
“Me pongo los audífonos, porque es cansado estar dentro de la combi por tanto tiempo, es lo único que me regala, además si puedo adelantar algo del trabajo lo hago”, explicó la joven.
Llegando a Guayabal, Karen sabe que le queda poco tiempo para llegar a su trabajo, pero aún tiene que atravesar la ciudad. Después de una hora y media en la combi, Karen finalmente llega
al Tomás Garrido y camina por Paseo Tabasco para llegar a su oficina. “Salgo con una hora de anticipación de lo normal, para evitar este tráfico, pero es casi imposible hacerlo”, mencionó.
Karen describe su rutina como pesada, ya que pasa más tiempo en el transporte público que en otros lugares. Aunque intenta salir con anticipación para evitar el tráfico, a menudo es imposible hacerlo.
En total, Karen pasa más de tres horas y media al día en el transporte público, lo cual resulta agotador. A pesar de todo, sigue cumpliendo con sus responsabilidades laborales, demostrando su compromiso y perseverancia.
“Es increíble, como pasamos hasta tres horas y media al día, en el transporte, lo digo porque de regreso es más rápido”, sentenció.
KAREN